Ciudad del Vaticano (Reuters).- El Papa Francisco creó una comisión especial para revisar las actividades del controvertido Banco Vaticano para garantizar que opera en “armonía” con la misión de la Iglesia Católica, dijo la Santa Sede.
La conformación del panel de cinco miembros, que incluye a cuatro prelados y una profesora de Harvard, es la maniobra más audaz de Francisco para tomar el control de un banco que ha avergonzado a la iglesia durante décadas.
El Instituto para las Obras de Religión (IOR), como es conocido el banco formalmente, se ha visto empañado por acusaciones que apuntan a que no ha podido cumplir con los niveles de transparencia internacionales, que tienen como meta combatir el lavado de dinero y la evasión de impuestos.
El Vaticano indicó en un comunicado que la comisión daría a Francisco la oportunidad de “conocer mejor la carrera judicial y las actividades del Instituto para permitir una mejor armonización con la misión de la iglesia universal”.
Además, informó que la comisión tendría poderes completos para obtener toda la documentación y datos necesarios, aunque la autoridad de los reguladores existentes no se vería afectada.
El Papa Francisco ha puesto mucho énfasis en modificar la imagen de privilegio de las operaciones de la Iglesia y el nuevo presidente del IOR, Ernst von Freyberg, ha iniciado una revisión de todas sus cuentas y actividades.
Magistrados italianos están investigando al banco bajo sospecha de lavado de dinero, un cargo que la institución niega.