La última encuesta realizada por la consultora Vox Populi señala que en caso las elecciones municipales fueran mañana, el ex alcalde Luis Castañeda de Solidaridad Nacional sería elegido como alcalde de Lima por tener la más alta aprobación en la intención de voto.
Luis Castañeda Lossio confirmó su liderazgo con 56% de la intención de voto, seguido de lejos por la actual alcaldesa de Lima, Susana Villarán (10%) y el candidato Salvador Heresi (6%), “sin que alguno de ellos se haya convertido en claro retador del ex alcalde”.
El resultado se basa en la campaña de Castañeda. “La estrategia del silencio (la palabra del mudo) en campaña ha contribuido al éxito de este fenómeno electoral limeño, quien también se ha beneficiado por la amplia desaprobación y rechazo que tiene la actual alcaldesa y candidata Susana Villarán”.
La consultora afirma que la intención de voto por Castañeda es muy alta en todos los segmentos, pero es particularmente favorable entre los electores más jóvenes y en los niveles socioeconómicos más bajos.
“Existe 21% de indecisos, que no votaría por alguno de los candidatos o no contesta a la pregunta de intención de voto”.
Rechazo
Asimismo, sostiene que sorprende el altísimo nivel de rechazo de Susana Villarán (58%), quien tiene más que el doble de la suma de los otros doce candidatos, que juntos llegan a 24% de rechazo.
El mayor rechazo a Villarán está en los niveles D y E, mientras el mayor rechazo a Castañeda está en los niveles A y B.
Solo 18% de votantes no tiene rechazo por alguno de los candidatos o no contesta.
Intención de voto
Vox Populi observa un fuerte enfrentamiento de los candidatos que lideran la intención de voto, un índice muy favorable para Castañeda (48) y uno muy negativo para Villarán (-48).
El índice muy alto de Castañeda le otorga grandes probabilidades de ganar la elección, a la vez que el índice muy bajo de Villarán no le permite muchas posibilidades de crecimiento.
Decisión
Según la encuesta, solo 47% de votantes ha decidido por quién votar para alcalde de Lima y afirma que no cambiará su decisión de voto. “A ocho semanas de la elección, el nivel de indecisos se sitúa en 53%, ya que el 26% ha decidido pero podría cambiar de opinión 25% no ha decidido, en tanto que 3% no contesta”, afirmó.