AFP.- Decenas de dirigentes del mundo entero rindieron el viernes en Jerusalén un último homenaje al ex presidente israelí.
Las exequias de Shimon Peres, fallecido el miércoles a los 93 años, fueron un homenaje a uno de los fundadores del Estado de Israel e impulsor de los acuerdos de Oslo que debían allanar el camino a la paz con los palestinos y los árabes.
Del funeral participó el presidente estadounidense Barack Obama y sus homólogos francés y alemán, el príncipe Carlos y el rey de España, entre otros.
También asistió el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, quien al llegar estrechó la mano de Netanyahu, con quien no se reúne desde 2010.
Esta primera aparición pública en Jerusalén en años expone a Abas a las críticas de los palestinos, que tienen una imagen negativa de quien asocian con la colonización judía y hombre de la guerra.
Peres era el único sobreviviente de los tres galardonados con el Nobel de la Paz en 1994, que recompensó su implicación en el acuerdo de paz de Oslo con los palestinos.
En su país se había convertido en una personalidad ampliamente consensual, considerado un sabio de la nación.