(Bloomberg) El fiscal especial Robert Mueller está reforzando su equipo de investigadores a cargo de la posible confabulación entre la campaña de Donald Trump y Rusia, agregando a un alto funcionario del Departamento de Justicia que supervisa pesquisas en curso sobre fraude corporativo y sobornos en el extranjero, según personas familiarizadas con el asunto.

El oficial, Andrew Weissmann, es el funcionario gubernamental más importante en unirse a Mueller, el exdirector del FBI que se convirtió en fiscal especial el 17 de mayo, dijeron dos personas, que pidieron no ser identificadas discutiendo un asunto de personal que no se ha hecho público. Mueller recientemente convocó a Peter Carr, un veterano portavoz del Departamento de Justicia, para tratar con los medios de comunicación. También contrató al menos a dos abogados de su antiguo bufete Wilmer Cutler Pickering Hale & Dorr LLP.

Como jefe de la sección de fraude del Departamento de Justicia en la administración Obama, las especialidades de Weissmann han incluido delitos corporativos y corrupción extranjera.

Ha supervisado las investigaciones a Volkswagen sobre el fraude de diésel, a bancos globales por manipulación de mercado y a la petrolera estatal brasileña, Petrobras, sobre pagos corruptos.

También inició una programa piloto que ofrecía a las empresas incentivos para informar posibles violaciones de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero, que prohíbe sobornar a funcionarios extranjeros.

Weissmann trabajó previamente para Mueller como abogado principal del FBI de 2011 a 2013. También tiene experiencia con investigaciones especiales, después de haber trabajado y posteriormente dirigido el grupo de trabajo de Enron durante el gobierno de George W. Bush.

Weissmann no respondió inmediatamente a mensajes que buscaban comentarios. Carr, el portavoz de Mueller, y Wyn Hornbuckle, un portavoz del Departamento de Justicia, se negó a comentar.