Las Fuerzas Armadas sirias anunciaron este lunes el fin de la tregua iniciada hace una semana por Estados Unidos y Rusia, que se acusan mutuamente por el fracaso de este nuevo intento de poner fin al conflicto.
Desde Nueva York, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, afirmó que las condiciones para una cooperación militar de Estados Unidos con Rusia, un aspecto clave del acuerdo de tregua del 12 de septiembre, no estaban reunidas.
En un comunicado difundido por la agencia de prensa siria SANA, Damasco anunció que la suspensión de los combates anunciada hace una semana terminó y acusó a los grupos rebeldes “de no respetar ninguna de las disposiciones” del acuerdo.
La tregua respaldada por las dos superpotencias, Rusia y Estados Unidos, tenía por ambición poner fin a cinco años de un conflicto en Siria en el que murieron más de 300,000 personas y millones se vieron obligadas a abandonar sus hogares.
Pero luego de varios días de una relativa calma, los combates se reanudaron progresivamente en la mayoría de los frentes, hasta el punto que un bombardeo de la coalición liderada por Estados Unidos atacó el fin de semana una posición del ejército sirio.
“Se suponía que la tregua debía ser una verdadera oportunidad para terminar con este baño de sangre, pero los grupos terroristas armados incumplieron este acuerdo”, indicó Damasco en un comunicado.
Por su parte, Kerry, que negoció el acuerdo con su contraparte rusa, Serguei Lavrov, afirmó que Rusia falló en cumplir con su parte de la tregua, pero que Washington está dispuesta a continuar trabajando en ella.
Según los términos del acuerdo, si el cese al fuego se mantenía, Estados Unidos debía crear una célula militar con Moscú para atacar a los grupos yihadistas que operan en Siria.
‘No se respetaron las condiciones’
En total, en una semana de tregua, 27 civiles, entre ellos 9 niños, murieron, según el OSDH.
El peor día para los civiles fue el domingo, cuando un barril de explosivos estalló en un ataque del ejército sirio causando 10 muertos en una localidad rebelde del sur. Ese día una mujer murió en un ataque aéreo en Alepo.
El presidente sirio Bashar al Asad acusó este lunes a Washington de haber cometido una “agresión flagrante”.
Aprovechando este ataque los yihadistas lograron tomar la colina Thurda, que domina el aeropuerto de Deir Ezzor controlado por el régimen, según una fuente militar. Con esta posición los yihadistas pueden impedir los movimientos de aviones y helicópteros.
La tregua debía permitir la llegada de ayuda humanitaria a la regiones más necesitadas, pero la llegada se hacía este lunes a cuentagotas.