Bagdad (AFP).- Las fuerzas iraquíes anunciaron el jueves haber retomado la emblemática mezquita de Mosul donde el jefe del grupo Estado Islámico (EI), Abu Bakr al Baghdadi, efectuó su única aparición pública y proclamó su “califato” en julio de 2014.
El anuncio fue hecho por el ejército iraquí, aunque un comandante de las fuerzas especiales iraquíes matizó a la AFP que la mezquita Al Nuri --cuyo minarete fue derrumbado con explosivos por EI la semana pasada-- no había sido aún totalmente reconquistada, aunque estaba a punto de serlo.
“Las fuerzas del Contraterrorismo tomaron el control de la mezquita Al Nuri y (de su minarete) Hadba”, se indica en un comunicado.
Sin embargo el general Abdulwahab al Saadi precisó que las fuerzas estaban a punto de reconquistar la mezquita, pero que se hallaban aún a una distancia de 20 metros.
El pasado 21 de junio varias explosiones provocadas por los yihadistas destruyeron el icónico minarete de la mezquita conocido como “Hadba” (joroba).
El primer ministro iraquí, Haider Al Abadi, calificó entonces la acción de “declaración oficial de derrota” por parte del EI, en momentos en que las tropas iraquíes avanzan en la Ciudad vieja de Mosul, último reducto de los yihadistas, y dan otro paso hacia el control total de la ciudad.
Mosul, segunda ciudad del país, cayó a mediados de 2014 en manos del EI, que la convirtió en su feudo en Irak.
Fue precisamente en la mezquita Al Nuri donde en julio de 2014 el líder de los yihadistas radicales, Abu Bakr Al Baghdadi, se había proclamado “califa” de los territorios conquistados por sus combatientes en Irak y Siria. Aquella fue la única aparición en público conocida del jefe de Estado Islámico.
Tres años después, se ignora el paradero de Baghdadi, mientras sque el EI ha perdido gran parte de los territorios que conquistó tanto en Irak como en Siria.
Destrucción anunciada
La destrucción la semana pasada por parte de los yihadistas del minarete de la Mezquita de Mosul --uno de los monumentos más reconocibles del país al que se denominaba también la Torre de Pisa iraquí-- conmocionó al país.
Pero esta demolición ya se preveía: mandos militares habían advertido que el EI no permitiría que las fuerzas iraquíes retomasen el control de ese monumento en lo que sería una victoria altamente simbólica.
Según el órgano de propaganda de EI, Amaq, la mezquita fue alcanzada por un bombardeo estadounidense, pero la coalición liderada por Estados Unidos aseguró que fueron los yihadistas quienes “destruyeron uno de los mayores tesoros de Mosul y de Irak”.
La demolición del recinto religioso en la ciudad vieja de Mosul se suma a una larga lista de monumentos históricos y patrimonio de valor inestimable destruidos por Estado Islámico en sus tres años de control de partes de Irak y Siria.
El minarete, cuya construcción se completó en 1172, aparece en los billetes de 10.000 dinares iraquíes y era un gran símbolo de la segunda ciudad de Irak, que ha dado su nombre a innumerables restaurantes, empresas y clubes deportivos.
Civiles atrapados
Las fuerzas iraquíes ya se habían aproximado a la mezquita Al Nuri la semana pasada, pocos días después de lanzar el 18 de junio su asalto para retomar el casco antiguo, último distrito de Mosul que sigue bajo control de EI.
Se cree que unos 100,000 civiles siguen retenidos allí por los yihadistas y que éstos los utilizan como escudos humanos.
La zona controlada por EI es pequeña pero sus estrechas callejuelas y la presencia de tantos civiles hace muy peligrosa la operación de reconquista total de la ciudad.
A todo ello se añade la feroz resistencia que oponen los combatientes yihadistas, por lo que fuentes militares iraquíes aseguran que la batalla por la Ciudad vieja está lejos de haber terminado.