A la renovada ciudad de Medellín, que con su transformación se distancia del estigma de violencia del narcotráfico, la visita del papa Francisco el próximo sábado le potenciará su turismo religioso con la llegada de unos 176,000 visitantes, según las autoridades.
En contraste con los tours sobre el extinto capo Pablo Escobar, la mayoría de ellos clandestinos y alejados del relato de las víctimas, la segunda ciudad de Colombia tiene ahora la posibilidad de sumar un atractivo más agradable, con un producto turístico religioso que esperan afianzar con las nueve horas que durará la visita del obispo de Roma.
“Medellín es un referente en el tema religioso que se potenciará con la visita del papa y las cifras positivas que proyectamos: más de 176,000 visitantes, una ocupación hotelera del 90 % y una inyección económica de US$ 22.4 millones”, dijo a Efe la subsecretaria de Turismo de Medellín, Juliana Cardona Quirós.
Esta urbe, considerada una de las más innovadoras del mundo por su sistema integrado de transporte, parques biblioteca y centros culturales, es un destino religioso, pues cuenta con 341 parroquias que constituyen el mayor número de iglesias del país y que son una muestra del catolicismo de la gente del departamento de Antioquia.
Eje de la visita
Por esa razón, el eje de la visita de Francisco a Medellín, donde mantendrá un encuentro con sacerdotes, seminaristas, monjas y sus familias, será “la vida cristiana como discipulado”.
“Antioquia es fuente de vocación religiosa en Colombia. Allí se han gestado importantes congregaciones al servicio de Dios, posicionándose como ejemplo de arraigo cristiano”, según los organizadores de la visita.
Del pueblo de Jericó, también en Antioquia, es la Madre Laura Montoya, la única santa colombiana, y el papa beatificará el viernes en Villavicencio a dos mártires del país, entre ellos el obispo Jesús Emilio Jaramillo Monsalve, nacido en Santo Domingo, en esta misma región y asesinado en 1989 por la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
En la Comuna 13 está ubicado el santuario de la Madre Laura, lugar de peregrinaje que recoge la vida y obra de la santa canonizada por el papa Francisco y cuyas reliquias serán llevadas al encuentro religioso del sábado.
Se espera que el santuario sea visitado ese día por unos 5,000 fieles para conocer la habitación de la religiosa, la sala de escritura y el museo etnográfico, entre otros.
“Esperamos que sea uno de los lugares más visitados en los próximos días”, agregó Cardona.
Fuerte turismo religioso
El magnetismo que ejerce la santa, con unos 800 visitantes en promedio los fines de semana, lo mantienen las misioneras, llamadas “Las Lauritas”, que transmiten su historia y se emocionan con la cita del sábado, pues para ellas “la visita del santo padre va a movilizar a América Latina por el contexto social y la cercanía”.
“El peregrino aprovechará para conocer los lugares de fe, así que esperamos una visita masiva”, manifestó a Efe la misionera Ana María Palomino, quien está a cargo de las comunicaciones del santuario.
Las religiosas no solo tienen preparado un plan de contingencia para los próximos días sino que además reciben capacitación como guías turísticas y clases de inglés.
Por ahora se preparan “con la fuerza humana de las hermanas y los misioneros” para la reunión con el papa que elevó a santa a la madre Laura y que espiritualmente estará presente en ese “encuentro de consagrados”.
El DATO:
Los visitantes extranjeros esperados el sábado, procedentes de países como Panamá, Ecuador, México, Estados Unidos, Salvador, Perú y Venezuela, podrán recorrer el centro de la ciudad, donde se concentra la mayor cantidad de parroquias y el 70 % de atractivos turísticos, para ampliar la experiencia religiosa.