AFP.- La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, pidió a los venezolanos jugarse todo contra la Asamblea Constituyente impulsada por el presidente Nicolás Maduro y que se votará el domingo, ante las persecuciones y atropellos cometidos por el gobierno.
“Hay que oponerse a la Constituyente. Pueblo de Venezuela, ante las severas persecuciones y dantescos atropellos, quiero que sepan que estoy resteada (jugándose todo) con ustedes”, expresó Ortega en rueda de prensa.
La funcionaria afirmó que la Constituyente solo busca incrementar la persecución política contra quienes piensan distinto al gobierno.
“Si está Constitución la van a transformar es porque lo que se cierne sobre Venezuela es una forma de justificar los atropellos, los allanamientos sin orden judicial, cárcel para todo el mundo, por haberse opuesto a la Constituyente”, expresó.
Ortega rechazó que el abogado Ángel Zerpa, a quien el Parlamento, de mayoría opositora, designó magistrado de una corte suprema paralela, haya sido detenido y aseguró que se le está violando el derecho al debido proceso.
“Hoy fue la audiencia de presentación y no le permitieron que nombrara a un abogado de confianza. Tuvo que defenderse él personalmente y está siendo juzgado por la justicia militar”, denunció.
La fiscal pidió a los ciudadanos que la acompañen a exigir justicia y a defender la actual Carta Magna.
“¿Hasta cuándo el país seguirá tolerando violaciones a la Constitución? El poder no se puede asumir para oprimir al pueblo o perseguir a la disidencia. Se le están violando los derechos humanos a los venezolanos”, expresó.
Ortega es una veterana chavista que rompió con Maduro hace casi cuatro meses al calificar como “ruptura del orden constitucional” dos fallos del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que socavaron facultades del Parlamento.
También ha rechazado la Constituyente en varias oportunidades, porque, asegura, debió preguntarse a los venezolanos en referendo si desean modificar la Carta Magna y que busca instaurar un sistema comunista en el país.
Maduro ha insistido en que la Constituyente se votará el 30 de julio, a pesar de las fuertes protestas opositoras y llamados internacionales que exigen su salida del poder y rechazan la iniciativa.
Las manifestaciones, que llevan casi cuatro meses, dejan un centenar de fallecidos.