Caracas (Reuters).- La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, alertó el martes que en las próximas horas espera su destitución por parte de un “ilegítimo” tribunal supremo que inició un antejuicio de mérito en su contra a pedido de un diputado del partido de Gobierno.
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) comenzó una audiencia para conocer los alegatos de las partes con la ausencia de Ortega.
“No acudí al Tribunal Supremo de Justicia, no voy a convalidar un circo que teñirá nuestra historia con vergüenza y dolor y cuya decisión está cantada. No lo reconozco”, dijo Ortega en una declaración en la sede del Ministerio Público.
“Ya sabemos que en el día de hoy (martes) va a operar mi remoción”, agregó. “No me voy someter a ese tribunal inconstitucional e ilegítimo. Este es un fraude procesal con el que se pretende intimidar a la fiscal, pretenden callarme”.
Ortega, quien se ha desmarcado del Gobierno desde hace tres meses cuando empezó la ola de protestas opositoras en medio de las que han fallecido 90 personas, dijo que el proceso que se le sigue está plagado de irregularidades procedimentales y o calificó como “espurio” y “amañado”.
El episodio eleva la temperatura en el país petrolero sudamericano que atraviesa una grave crisis política y económica en medio de fuertes protestas de la oposición que considera al gobierno de Nicolás Maduro como una “dictadura”.
El mandatario de 54 años, por su parte, se ha defendido asegurando que su llamado a una Asamblea Nacional Constituyente, que modifique la carta magna, sólo busca pacificar el país ante la arremetida de sus adversarios que intentan desbancarlo.
“Este es un golpe de Estado, más grotesco que el de Carmona”, dijo Ortega en referencia a la breve toma del poder del empresario Pedro Carmona contra el fallecido Hugo Chávez.
Más temprano, la máxima corte del país nombró a Katherine Haringhton -una funcionaria cercana al Gobierno de Maduro y sancionada por Estados Unidos- como vicefiscal en reemplazo de uno nombrado por Ortega y avalado por la Asamblea Nacional, controlada por la oposición.
En caso de que Ortega fuera destituida, Haringhton asumiría como fiscal general de Venezuela.