AFP.- El estado Barinas, cuna del fallecido expresidente venezolano Hugo Chávez, fue escenario de fuertes disturbios que dejaron tres muertos e incluyeron la quema de oficinas públicas y saqueos, lo que elevó a 51 los muertos desde que se reiniciaron las protestas en contra del gobierno de Nicolás Maduro.
La Fiscalía confirmó que un joven de 19 años murió baleado durante los desórdenes en esa región del oeste del país y posteriormente, en horas de la noche, reportó dos nuevos decesos.
Los sucesos elevan a 51 la cifra de fallecidos en Venezuela en 52 días de protestas opositoras contra el presidente Nicolás Maduro.
El vicepresidente, Tareck El Aissami, responsabilizó de la violencia a “grupos armados” vinculados con la oposición, que este lunes cumplió otra jornada de movilizaciones en distintas ciudades del país.
“En el estado Barinas es donde más se desataron los odios de estos grupos armados”, dijo el funcionario en una declaración pública.
Según El Aissami, manifestantes a los que llamó “terroristas”, incendiaron la sede del gubernamental Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), atacaron destacamentos de la militarizada Guardia Nacional y de la policía regional, saquearon comercios y destruyeron un almacén de medicamentos.
Una de las rectoras del Consejo Nacional Electoral, Tania D’Amelio, denunció que la sede del organismo en Barinas también fue “saqueada y quemada”.
Durante ocho semanas de protestas contra Maduro, convocadas por la oposición en exigencia de elecciones generales, se han producido severos enfrentamientos entre manifestantes y cuerpos de seguridad.
Los disturbios han dejado además casi un millar de heridos y 2,600 de detenidos, según la organización no gubernamental Foro Penal.
Dirigentes opositores responsabilizan al gobierno de gestar la violencia, acusándolo de “una salvaje represión” por parte de militares y policías contra los manifestantes.