(AFP) Luego de ser destituida de la presidencia de Brasil, el abogado defensor de la expresidenta brasileña Dilma Rousseff, José Eduardo Cardozo, pidió este jueves a la corte suprema la anulación del fallo del Senado que destituyó a Rousseff de su cargo menos de 24 horas antes.

Así mismo, José Eduardo Cardozo coincidió también con su representada en calificar la destitución de la presidencia de Brasil como un “golpe parlamentario”. “Vamos a entrar en el Supremo Tribunal Federal para plantear la anulación del proceso”, precisó el abogado de Dilma Rousseff.

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“No existen hechos para que un presidente sea destituido de su cargo. La Constitución brasileña dice que para que un presidente sea destituido tienen que haber ocurrido hechos ilícitos graves, y Dilma no ha cometido hechos ilícitos graves. Son pretextos jurídicos utilizados por la oposición y por otros parlamentarios que no querían la continuidad de su gobierno”, señaló.

La apelación, a la que accedió la AFP, solicita “la suspensión de inmediato de los efectos de la decisión del Senado Federal que condenó por crimen de responsabilidad a la Presidenta de la República”, según el texto firmado por José Eduardo Cardozo.

Por otro lado, indicó que no será fácil la apelación. “Es una situación compleja, porque hay una jurisprudencia en el Brasil de que la Justicia no puede rever los juicios políticos del Senado, lo que me parece correcto… en un Estado de Derecho”, puntualizó José Eduardo Cardozo.