(AFP) La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) inició este martes una sesión de dos días para analizar los derechos de la población homosexual y transexual, a la luz de la convención continental sobre tales derechos.
La sesión se realiza a pedido del gobierno de Costa Rica, que consultó a la corte si los países firmantes de la Convención Americana de Derechos Humanos deben reconocer la identidad de género de cada persona, y admitir así el cambio de nombre para personas que se identifican con uno, acorde con el género con el cual la persona se reconoce.
También pidió a la CIDH definir si la comunión de bienes patrimoniales derivados de un vínculo entre parejas del mismo sexo se encuentra protegida por la convención.
“Ante el arraigo de prejuicios existentes en el continente americano que vulneran los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales y trans, Costa Rica percibe necesaria y justa una guía que brinde mayor detalle y certeza jurídica a la protección de la orientación sexual e identidad de género”, dijo la vicepresidenta de Costa Rica, Ana Helena Chacón, al tribunal en San José.
En la sesión, que se extenderá hasta la mañana del miércoles, los jueces de la CIDH comenzaron a escuchar opiniones de los Estados partes de la convención y organizaciones civiles sobre los temas de la consulta.
El secretario de Derechos Humanos de Argentina, Javier Salgado, comentó en la sesión que “orientación sexual e identidad de género son categorías protegidas por la Convención Americana de Derechos Humanos”.
Acotó que “la presunta falta de consenso en el interior de algunos países no puede ser un argumento válido para permitir la discriminación histórica que estas minorías han sufrido”.
Similar opinión expresó el representante boliviano Roberto Arce, quien destacó la importancia de la interpretación de la CIDH servirá para ayudar a los Estados parte de la convención a encontrar formas de asumir los compromisos en esta materia.