Tomado de El Mercurio de Chile .- Sorpresa ha causado el último estudio comparativo del Banco Mundial sobre clima de negocios (el popular Doing Business), en el que Chile retrocede dos puestos respecto de la medición anterior y pierde el cetro del mejor desempeño en América Latina.
Varios otros indicadores de competitividad internacional acusan un deterioro semejante. Consultado sobre ello, el ministro de Hacienda de Chile, Alberto Arenas, lo ha calificado de “dato puntual”, en tanto su colega de economía, Luis Felipe Céspedes, lo ha atribuido a la falta de reformas estructurales durante el gobierno anterior.
Un dato a destacar es que los países están incesantemente afinando sus políticas públicas para crear un mejor ambiente de negocios. Ese empeño convoca tanto a los más ricos -Austria, Estados Unidos, Francia, Inglaterra y Suiza, por ejemplo, que están entre los más de 40 países que en el último año han adoptado medidas que facilitan la creación de empresas- como a los más pobres, incluidos los africanos.
Sobresalen, por ejemplo, los avances de Benín, Mozambique, Costa de Marfil y Senegal. Quien no se mueve se queda atrás.
Lo segundo que llama la atención son los avances de Colombia, Perú y México, que, situados respectivamente en los puestos 34, 35 y 39, relegan a Chile al lugar 41. Los tres tienen un común denominador, son parte de la Alianza del Pacífico.
El veredicto del Banco Mundial sobre Chile es preocupante. Luego de la notable reducción de trámites exigidos para crear empresas -que rebajaron de 40 a solo 5.5 días el tiempo requerido-, Chile parece haberse “dormido en sus laureles”.
Aunque el estudio del Banco Mundial aún no recoge los positivos efectos de la nueva Ley de Quiebras y de cierta simplificación de trámites de comercio exterior, el panorama que pinta es de un país que no toma en serio el desafío de la competitividad.
*Tomado de El Mercurio de Chile *