El expresidente Alan García consideró “positivo y legal” que la Fiscalía de la Nación verifique sus ingresos, luego de que más temprano dicha entidad decidiera levantarle el secreto bancario y el tributario en el marco de la investigación que se le sigue por la compra de una casa en la urbanización San Antonio, en Miraflores, valorizada en US$830 mil.
Como se sabe, el pasado 5 de febrero, el despacho del fiscal de la Nación, José Peláez, abrió una investigación preliminar contra el líder aprista por la presunta comisión del delito de enriquecimiento ilícito, tras revelarse la referida operación inmobiliaria.
En la resolución que informó sobre el inicio de la indagación se mencionó que “se cuenta con datos que revelarían un incremento en el patrimonio” del exmandatario y que existe el indicio de que el origen de los fondos empleados para la compra “no se encontraría debidamente justificado”.