El expresidente Alan García respondió al pedido que hizo la ‘megacomisión’ para acusarlo constitucionalmente por presuntas irregularidades en el programa Agua para Todos, durante el último gobierno aprista.
“Es una acusación formulada por tres enemigos políticos que votaron por ella y no tiene ningún valor jurídico o político”, afirmó García Pérez en un comunicado.
Agregó que el pedido de acusación se dio a conocer justamente hoy “para ocultar que se entregó la cabeza del canciller por orden del Gobierno venezolano a cambio de los recursos chavistas recibidos en las campañas presidenciales del 2006 y el 2011”.
El exmandatario reiteró que la “persecución” en su contra también busca inhabilitarlo como adversario para los fines de la reelección conyugal.
Además, indicó que la supuesta irregularidad en Agua para Todos responde a que el Parlamento anterior a su gobierno aprobó una ley que aceleraba las obras, pero que el expresidente Alejandro Toledo formuló observaciones en el último día de su gestión.
“En el primer día de mi gobierno yo retiré esas observaciones (…) No hay delito ni falta. Si me quieren acusar por dar agua y desagüe a más de un millón de limeños, acúsenme, porque lo volvería a hacer”, sostuvo.