PULSO PERÚ. El mes pasado, la encuesta de Pulso Perú había registrado uno de los saltos más largos, en términos de popularidad, en la trayectoria de Ollanta Humala como Presidente. Esta vez, sin embargo, la caída fue mucho más abrupta. No solo su aprobación sufrió el mayor revés de su mandato sino que el número al que ha llegado es el más bajo que ha visto en todo este tiempo. Solo 24% aprueba la labor de Ollanta Humala como Presidente de la República y un abrumador 71% la
desaprueba.
El principal motivo del descontento, naturalmente (pues no mucho ha cambiado), es la incapacidad del Gobierno para enfrentar temas como el combate a la inseguridad ciudadana. Pero la mayor diferencia en las respuestas de los encuestados respecto a meses anteriores es el protagonismo, cada vez mayor, que ha ido adquiriendo su esposa y primera dama, Nadine Heredia, al punto tal que el 62% considera que ella tiene más poder que el propio presidente.
La salida del ex Premier, César Villanueva, terminó por confirmar lo que muchos ya sospechaban: el involucramiento directo de Heredia en las decisiones del Gobierno. La mayoría, por ejemplo, piensa que Villanueva fue sacado del cargo, y, a su vez, la mayoría de ellos, consideran que la primera dama fue la responsable.
En este contexto, entonces, no es sorprendente que la popularidad de Nadine Heredia se haya movido en forma paralela a la de su esposo (ella también vio la mayor caída en su aprobación y la mayor escalada de su desaprobación para llegar a los niveles históricos de 24% y 69%, respectivamente). Y es que, la verdad, no es que solo se hayan movido en forma paralela sino que se han movido de la mano. El 73% de personas considera que la presencia de la esposa de Humala perjudica al gobierno. Y esto se debe, sin duda, al poco respeto que ha demostrado por la institucionalidad del país.
De la misma forma, la debilidad del Presidente por cuidar la institucionalidad dentro de su gobierno le está pasando factura. Ahora, para esta ocasión, no solo hay que considerar a la pareja presidencial. El ministro Luis Castilla, cada vez más asociado con la cúpula de poder formada por el matrimonio Humala-Heredia, ha caído de forma similar. Su aprobación se ha desplomado a 16% y especialmente en el sector AB, en momentos en que el ciudadano de a pie empieza a mostrarse pesimista. Ha llegado el momento de poner las barbas en remojo.