Todo parece indicar que la renta variable será la apuesta ganadora, en términos generales, de este año. Y es que, el crecimiento esperado de nuestra economía (alrededor del 6%), sumado a alternativas poco alentadoras por el lado de la renta fija, se constituyen como grandes razones para la expectativa de buenos resultados en la Bolsa de Valores de Lima (BVL). Así lo aseguró Luis Arizmendi, presidente de GPI Valores SAB.
“Vemos que no hay demasiadas alternativas por el lado de los instrumentos de renta fija -que pagan un cupón o una tasa de interés predeterminada-, y a su vez esas tasas son muy bajas. Por ello, en términos generales, la BVL debería estar en una fase positiva este año”, sostuvo Arizmendi a Canal N.
Explicó que las expectativas para las bolsas asiáticas son bastante altas, y señaló que si bien China ya no crece a ritmos de entre 10% y 12%, como hace 10 años, su economía es mucho más grande, por lo que se esperaría que la demanda por nuestros minerales se mantenga fuerte.
Respecto a Europa, Arizmendi es más escéptico y opinó que este año ya no se tendrán los mismos resultados del 2012 (rendimientos altos), los cuales, en muchos países superaron la rentabilidad de la BVL (como el caso de Alemania).
“Yo no creo que esto se repita. Se prevé que las bolsas europeas estén relativamente planas porque se asociarán más al crecimiento de sus economías, cuyo rango está entre -1% y -1.5%, además de los indicadores de desempleo relativamente altos, y sus problemas de déficit fiscal”, expresó.
Mientras que las proyecciones de Arizmendi para Estados Unidos, luego de resuelto a medias el abismo fiscal, apuntan a una tendencia al alza y a indicadores que se mantendrán por el lado positivo, como el progreso del empleo.