El presidente de la Asociación de Industriales Lácteos (ADIL), Rolando Piskulich, defendió los productos de leche deslactosada, como los que produce Gloria, porque no genera daños a las personas que son intolerantes a la lactosa.
“Yo le puedo garantizar que el contenido de lactosa que da como traza en un producto, como el que nosotros vendemos como deslactosada, no le puede hacer daño a nadie”, indicó.
Explicó que en el mercado peruano se pueden encontrar productos con la etiqueta de deslactosada, que tienen cantidades tan pequeñas de lactosa que resultan inofensivas.
“En el caso de la lactosa, la intolerancia a la lactosa no es absoluta sino relativa, es decir que unos son más intolerantes que otros. A nivel de deslactosados, que hemos presentado en nuestro producto y que contenía 0.001% de lactosa, ese nivel de lactosa no puede hacerle daño a nadie”, mencionó.
En ese sentido, manifestó que cuando los consumidores vean en el mercado a un producto deslactosado entonces puede tomarlo con confianza porque no le va a hacer daño.
“Si contiene una pequeña pizca de lactosa, pues esa lactosa no va a ser detectada por su cuerpo como no se detecta una pequeña pizca de plomo y hasta de arsénico”, acotó en RPP Noticias.
Mencionó que los niños y adolescentes pueden tomarse un vaso de leche y no les pasa nada, pero si toman dos entonces empiezan a notar si son intolerantes a la lactosa o no, por lo que los productos deslactosados son una alternativa.
Precisó que en la industria existen dos formas de quitarle la lactosa a la leche y la que emplea Gloria principalmente es la ósmosis inversa, que es filtrar la lactosa y que es la modalidad más eficiente.
“Hay otra forma en la que se agrega la lactasa que ya disuelve la molécula (de lactosa) y cuando llega a la persona ya no aparece esa molécula porque su organismo no la va a poder disolver”, agregó.