Entre agosto y noviembre del año pasado Graña y Montero cotizaba entre S/ 4.50 y S/ 5 la acción y alrededor del 20 de noviembre, cuando Sempra anunció que no comprará las acciones del Gasoducto Sur Peruano se genera la primera gran caída en un 20%, comenta Alberto Arispe, gerente general de Kallpa SAB.

Tras la primera gran caída, comento que se han dado dos caídas adicionales, el 20 de diciembre, tras la confesión de Odebrecht (con quien comparten varios proyectos) de que han realizado coimas al Gobierno, y la acción se derrumba en 33% y el día viernes último, tras las declaraciones de Jorge Barata, la acción cae en 33% adicional, con lo que el valor bursátil de la acción cayó en 65%

“Graña y Montero valía alrededor de US$ 1,100 millones hace tres meses y ahora vale US$ 440 millones. La razón por la cae, es por las expectativas de las ganancias de la empresa y el riesgo que están asumiendo”, comentó.

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Alberto Arispe sostiene que el negocio de la compañía está en “jaque” y mucho menos personas quieren ser accionistas, por lo que hay más posiciones de ventas que de compras.

Mañana es un decisivo para la compañía cuando se realice la Junta de Accionista, en la que sugiere cambios en la gerencia como una señal positiva al mercado.