(Reuters).- Goldman Sachs elevó hoy su proyección para los precios del zinc, el aluminio y el níquel, al anticipar que continuarían las desigualdades en los suministros en la industria de metales durante la segunda mitad del año.
“En nuestra opinión, el impacto del estímulo anterior todavía resultaría en un crecimiento suficiente de la demanda, por lo que seguiremos viendo una diferenciación en los suministros en la industria de metales durante la segunda mitad del 2016”, dijo el banco en una nota.
Goldman aumentó sus previsiones para el precio promedio del zinc en los próximos tres, seis y doce meses a 2,300, 2,500 y 2,000 dólares por tonelada, desde 2,000, 2,100 y 2,100 dólares previamente.
Goldman elevó su pronóstico para el precio promedio del aluminio en los mismos periodos a 1,550, 1,500 y 1,500 dólares por tonelada, mientras que mantuvo su estimación para el precio promedio del cobre en 4,500, 4,.200 y 4,000 dólares.
El banco espera que los precios del níquel promedien 11,000, 12,000 y 10,000 dólares por tonelada en los próximos tres, seis y doce meses, respecto a 2,500, 3,500 y 1,500 dólares por tonelada, bajo el supuesto de que algunas minas del metal en Filipinas cierren temporalmente.
Goldman agregó que el bajo rendimiento de los metales en relación a la energía se frenaría durante la segunda mitad del 2016, antes de retomar la tendencia el próximo año y en el largo plazo.
“En el largo plazo, los metales están en nuestra opinión más altamente expuestos a eventuales desendeudamientos en China y a un cambio desde un crecimiento liderado por la inversión e intensivo en metales a uno alentado por el consumo”, agregó.