Los precios internacionales de los productos básicos agrícolas siguieron descendiendo en abril y los abundantes inventarios deberían compensar cualquier presión a la baja por una ligera reducción de las cosechas mundiales prevista este año, reportó hoy la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Indicó que la producción mundial de cereales se reducirá probablemente en un 1.5% respecto a la producción récord del año pasado, debido principalmente a la disminución de la superficie plantada con maíz
“Pero el impacto se verá amortiguado por niveles ‘excepcionalmente altos’ de las actuales existencias”, según las últimas previsiones del informe semestral de la FAO denominado Perspectivas Alimentarias.
El pronóstico inicial de la FAO para la producción mundial de cereales en 2015, suponiendo condiciones meteorológicas normales durante el resto de la temporada, asciende a 2,509 millones de toneladas, un poco por debajo del récord del año pasado, pero casi un 5% por encima de la media de los últimos cinco años.
Esta modesta disminución de la producción haría descender los inventarios en alrededor del 3% en la nueva temporada (2015/16), con reducciones más rápidas para los cereales secundarios y el arroz que para el trigo.
“La factura mundial por la importación de alimentos se prevé descienda a su nivel más bajo de cinco años en el 2015”, dice el informe de la FAO debido principalmente por una caída de los precios internacionales, fletes bajos y un dólar estadounidense fuerte.
Los volúmenes de importación de los distintos alimentos que componen la factura cambiaron poco o incluso aumentaron. También se espera que los países de bajos ingresos se beneficien de este descenso en el coste de las importaciones de alimentos.
Caída de precios
El índice de precios de los alimentos de la FAO se redujo un 1.2% en abril respecto a marzo, situándose en 171 puntos, su nivel más bajo desde junio de 2010 y un 19.2% menos respecto a hace un año.
El mayor descenso se produjo en el precio de los productos lácteos, pero también disminuyeron los precios del azúcar, cereales y aceites vegetales. Por el contrario, los precios de la carne subieron en abril, su primer incremento desde agosto de 2014.
El índice de precios de los alimentos de la FAO es un índice ponderado por el comercio que hace un seguimiento de los precios de los cinco principales grupos de alimentos básicos en los mercados internacionales: cereales, carne, productos lácteos, aceites vegetales y azúcar.
Los precios internacionales de los alimentos es probable que continúen sometidos a presión a la baja debido a la oferta abundante y el fuerte valor del dólar de Estados Unidos.
Perspectivas y tendencias
Según la FAO, varios años de buenas cosechas y de creación de reservas estratégicas significan un superávit de alimentos básicos. Como resultado, no se espera que la caída prevista en la producción de cereales impacte en la disponibilidad de alimentos para el consumo.
Las tendencias de la producción láctea se prevé sigan con un crecimiento constante de cerca del 2% en 2015, con precios internacionales mas bajos alentando las importaciones en África.
La abolición del sistema de cuotas lácteas de la Unión Europea es probable impulse la producción, y fue uno de los principales motivos de la caída mensual del 6.7% en el índice de precios de los productos lácteos.
Se espera que la producción de azúcar aumente sólo ligeramente, impulsada por la India, la Unión Europea y Australia, pero seguirá superando el consumo por quinta temporada consecutiva.
Las abundantes cosechas de soja impulsarán un fuerte incremento del 5.7% en la producción total de cultivos oleaginosos en la temporada 2014/15. Ello, junto con el descenso de precios vinculado a una menor demanda desde el sector de los biocombustibles y el aumento de los inventarios, puede conducir a una reducción de la producción en la próxima temporada, según la FAO.
Se espera que la producción mundial de carne de vacuno crezca sólo un 0.2% en el próximo año, mientras que la producción total la carne crecerá un 1.3%.
El pescado es cada vez más popular en la dieta mundial, impulsado por el rápido crecimiento del sector de la acuicultura, que se espera aumente en un 5% en el próximo año. También se espera que la pesca de captura en el medio natural se recupere tras la escasez del año pasado debido al fenómeno climático de El Niño.
Esa recuperación fomentará el rápido crecimiento en el uso de las capturas de peces silvestres como pienso para la acuicultura.