(Bogotá, Reuters).- Colombia busca implantar el uso de máquinas para recolectar su cosecha de café y solucionar definitivamente el perpetuo problema de escasez de mano de obra que cada año pone en riesgo las metas de producción y exportaciones, dijo el martes el gerente de la Federación Nacional de Cafeteros.
Los caficultores de Colombia, el tercer productor mundial después de Brasil y Vietnam, buscan actualmente incorporar unas 60,000 personas para recolectar el grueso de la cosecha del 2016 entre septiembre y octubre.
El crecimiento de la caficultura en Colombia desbordó la capacidad de mano de obra, a lo que se sumó el desplazamiento de áreas rurales a las ciudades por el conflicto armado y la expansión de cultivos de café al sur del país, región que antes suministraba recolectores a zonas tradicionalmente productoras.
“Todo esto pone en déficit a la caficultura en términos de mano de obra para la recolección”, dijo en una entrevista con Reuters el gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, Roberto Vélez. “Este es un tema estructural y no coyuntural, hay que darle una solución rápida y definitiva”.
Aunque Colombia registró un desempleo nacional de 8,9 y de 10,2 por ciento a nivel urbano en junio, los productores de café cada año deben recurrir a anuncios en la radio para incorporar recolectores.
En los dos meses del pico de la cosecha, una persona puede ganar alrededor de 1.400 dólares libres como recolector de café y recibe el alojamiento y la alimentación sin costo. La cifra supera de lejos el salario mínimo mensual de 245 dólares que percibe un trabajador en Colombia.
Pero aún así, Vélez reconoció que la incorporación de mano de obra es difícil.
“La ayuda tiene que venir por el lado de la tecnología. Estamos haciendo los trabajos, los estudios, convocatorias a nivel internacional y nacional para ver qué se nos ocurre, qué podemos traer, qué hay de nuevo y qué podríamos incorporar en la recolección para hacerla más productiva y menos costosa”, dijo.
Aunque Brasil recolecta su cosecha con máquinas, los altos costos de estas y el terreno montañoso en donde se encuentran algunos de los cultivos de café en Colombia dificultan el uso de esa tecnología, de acuerdo a expertos.
Pero el dirigente cafetero aseguró que se busca hacer una máquina recolectora a la “colombiana”.
“La idea es sacar nuestra propia versión de lo que pueda ser una recolección asistida mecánicamente”, aseguró Vélez quien precisó que de las 950.000 hectáreas cultivadas con café, solo unas 200.000 hectáreas están en terrenos con pendientes menores de 30 grados en donde podría trabajar una máquina tradicional.
Colombia, el primer productor mundial de café arábigo lavado que se caracteriza por su suavidad y alta calidad, registró en el 2015 una cosecha de 14,1 millones de sacos de 60 kilos, la más alta en los últimos 23 años. Para este año el país espera una producción de 14,5 millones de sacos. (Reporte de Luis Jaime Acosta, editado por Gabriela Donoso)