Londres (Reuters).- El cobre cayó el jueves a su menor nivel en cinco semanas, ante la cautela de los inversores por la decisión que tomará la semana próxima la Reserva Federal sobre sus estímulos monetarios y tras cifras que resaltaron la fragilidad de la economía de la zona euro.
Aunque las perspectivas de un ataque militar de Estados Unidos a Siria se han reducido, las actuales tensiones en el país de Oriente Medio mantienen preocupados a los inversores. Sin embargo, la demanda china limitó el retroceso de los precios del cobre.
El cobre para entrega a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres tocó un mínimo de sesión de 7,025 dólares la tonelada, su menor nivel desde el 8 de agosto, pero luego recortó pérdidas y cerró con una baja de un 1.5%, a 7,060 dólares.
Los precios del cobre se han recuperado con respecto a mínimos de tres años registrados a fines de junio, pero no han logrado tomar impulso por sobre los 7,420 dólares la tonelada.
La producción en las fábricas de la zona euro cayó más de lo esperado en julio, en una señal de la debilidad de la demanda de los hogares europeos y la inestabilidad de la recuperación económica del bloque.
En cuanto a la demanda del metal rojo, las señales de que la economía de China está ganando estabilidad se ven reflejadas en el mercado del cobre y en las expectativas de su consumo.
El estaño sufrió su peor pérdida y cayó un 2% para cerrar en 22,355 dólares la tonelada; el plomo tocó su menor nivel en cinco semanas de 2,100 dólares la tonelada para luego recuperarse y terminar el día con una baja de un 0.1%, a 2,124 dólares.
El aluminio finalizó con un alza de un 0.6%, a 1,812 dólares la tonelada y el zinc avanzó un 0.1%, a 1,878 dólares. El níquel bajó un 0.3%, a 13,785 dólares.