Londres (Reuters).- El cobre bajó el miércoles presionado por el reinicio parcial de la producción en la segunda mayor mina de cobre del mundo, Grasberg en Indonesia, y por una mayor incertidumbre sobre las posibilidades globales de crecimiento.
El cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres bajó un 0.78% a 7,265 dólares la tonelada, revirtiendo las ganancias de la sesión anterior y dirigiéndose a una segunda semana de pérdidas.
Los precios del cobre se han recuperado desde el mínimo de menos de 6,800 dólares la tonelada alcanzado el mes pasado, pero han estado atrapados en un rango de entre 7,100 y 7,500 dólares desde principios de mayo.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) redujo su estimación de crecimiento global para este año a un 3.1% desde un 3.4% previo, mientras que el Fondo Monetario Internacional recortó su estimación de crecimiento para China durante este año a un 7.75% desde un 8%.
Además, Freeport McMoRan Copper & Gold Inc dijo que reanudará algunas operaciones en su mina Grasberg de Indonesia. Las operaciones en la mina han estado suspendidas desde que un colapso en un túnel mató a 28 personas hace más de dos semanas.
El aumento de la confianza del consumidor estadounidense y mejoras en el sector inmobiliario también afectaron al precio del cobre, pues aumentaban los temores de que la Reserva Federal inicie pronto su reducción de su enorme programa de estímulo.
Los mercados financieros han visto un aumento en la volatilidad desde que el presidente de la FED, Ben Bernanke, sugirió la semana pasada que el banco central podría comenzar a reducir su inyección mensual de fondos por 85,000 millones de dólares.
