Londres (Reuters).- El cobre subió el martes después de que unos datos sólidos sobre precios de casas y confianza del consumidor de Estados Unidos mejoraron el panorama para la demanda de metales en la mayor economía del mundo.
Sin embargo, el alza era contenida por un dólar fortalecido y preocupaciones sobre el crecimiento en China.
Los precios de los metales se vieron impulsados después de que los precios de las casas unifamiliares en Estados Unidos subieron en marzo a su mayor nivel en siete años y de que la confianza del consumidor en mayo se elevó a su nivel más alto en más de cinco años.
El cobre referencial en la Bolsa de Metales de Londres terminó la sesión con un alza de 0.32% a 7,322 dólares la tonelada, después de recortar ganancias tras alcanzar un máximo intradía de 7,379 dólares por tonelada.
El cobre en Londres se mantuvo mayormente estable la semana pasada, pero va encaminado a terminar el mes con un alza de más de un 4%, su primer avance mensual desde enero.
La actividad fabril de China se contrajo por primera vez en siete meses en mayo, mostraron datos divulgados la semana pasada, lo que volvió a generar preocupaciones entre los inversores en torno al crecimiento inconstante en el gigante asiático.
Comentarios de funcionarios emitidos el lunes también señalaron que el país, que es responsable por alrededor de un 40% de la demanda mundial de cobre refinado, está dispuesto a tolerar un crecimiento más lento.
Un dólar valorizado frente a una cesta de principales monedas pesaba sobre las materias primas con precios en dólares como los metales, haciéndolas más caras para compradores en otros países.
Pero la confianza se vio fortalecida por comentarios de un miembro del comité directivo del Banco Central Europeo, Joerg Asmussen, quien el lunes dijo que el banco mantendrá su política monetaria expansiva tanto tiempo como sea necesario.
Analistas dijeron que la reanudación de las operaciones en la mina gigante de Grasberg, en Indonesia, podría erosionar el respaldo para el precio del cobre.