Londres (Reuters).- El cobre caía en torno a mínimos de tres meses hoy después de que la producción industrial de China creció a su ritmo más débil en casi seis años en agosto, mientras los inversores seguían preocupados sobre el estancamiento en Europa y una esperada alza en las tasas de interés en Estados Unidos.
Al igual que la débil producción fabril de China, la expansión de otros sectores clave también se desaceleró, generando preocupación de que la segunda economía del mundo pueda estar en riesgo de una brusca ralentización a menos que Pekín implemente nuevas medidas de estimulo.
China consume el 40% del cobre mundial. Fuera de China, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) revisó a la baja el lunes sus previsiones de crecimiento para las principales economías desarrolladas, e instó al Banco Central Europeo a que ofrezca un estímulo más agresivo para alejar el riesgo de la deflación en la debilitada zona euro.
El cobre a tres meses en la Bolsa de metales de Londres (LME) caía en 0.47%, a US$ 6,805.75 por tonelada a las 1008 GMT. Más temprano, el metal llegó a caer hasta los US$ 6,770.75, cerca de US$ 6,734 por tonelada vistos el 11 de septiembre, el menor nivel desde el 20 de junio.
Las pérdidas eran moderadas al tiempo que operadores elevaban sus apuestas de que los banqueros centrales en China se embarcarán en medidas adicionales de estímulo para dar soporte a la economía frente a una desaceleración liderada por el sector inmobiliario.
Pero mayores dificultades para las materias primas provenían de las expectativas de que Estados Unidos pueda elevar sus tasas de interés más pronto de lo pensado, tras una serie de alentadores señales económicas.
Las ventas minoristas en Estados Unidos subieron ampliamente en agosto y la confianza del consumidor tocó máximos de 14 meses en septiembre, impulsando las expectativas de un fuerte crecimiento económico en el tercer trimestre.