Singapur (Reuters).- El cobre de Shanghái retrocedió el lunes y siguió estancado cerca de mínimos de la semana pasada debido a preocupaciones de que un crecimiento inestable no reciba nuevos estímulos monetarios.

Las operaciones también permanecían reducidas debido a feriados en Gran Bretaña y Estados Unidos. El contrato de setiembre, el más cotizado de la Bolsa de Futuros de Shanghái, cerró con una merma de 0.45% a 52,510 yuanes (8,600 dólares) la tonelada.

En un momento alcanzó un mínimo de 52,230 yuanes la tonelada, cerca de los 52,130 yuanes vistos la semana pasada, que fueron su anotación más débil desde el 16 de mayo.

La actividad fabril en China disminuyó por primera vez en siete meses en mayo, mostró la semana pasada un sondeo preliminar, renovando preocupaciones sobre el crecimiento en el principal consumidor mundial de metales.

Sumado a nuevas regulaciones en torno a la cotización del yuan, esto ha limitado la demanda de cobre, coincidiendo con la recaída habitual tras el período de mayor consumo del metal y amplificando la ralentización, dijo Sijin Cheng, analista de Barclays en Singapur.

Este año China continuará liberalizando sus tasas de interés, haciendo que el yuan esté más ligado a las fuerzas del mercado y sea más convertible, dijo el gobierno.

Al tiempo que Pekín toma medidas contra la especulación cambiaria, algunos bancos chinos han dejado de financiar a los importadores de cobre más pequeños, dijeron fuentes del mercado, poniendo freno a operaciones de miles de millones de dólares.