La empresa de investigación de mercado Euromonitor International ha lanzado un nuevo estudio “Mercados emergentes en crisis: estrategia de negocios para tiempos de incertidumbre”, que destaca tendencias clave que ofrecen a las organizaciones oportunidades de crecimiento en mercados emergentes durante crisis económicas.
En tiempos de crisis económica los consumidores compran productos y experiencias para interrumpir el presente y fingir que están en un contexto distinto a aquel que les causa tantas dificultades. De acuerdo con el estudio, el estatus gatilla un conjunto de emociones tales como orgullo y satisfacción y con frecuencia los consumidores compran objetos para reflejar estas emociones y comunicarlas al resto.
“En el 2009, al contraerse el PBI de Chile, las ventas de ginebra registraron un crecimiento superior al 10% en volumen de ventas. Los chilenos asocian esta bebida alcohólica con el Reino Unido, un país con el que tienen una obsesión histórica y suponen que tomarlo produciría un distanciamiento de los modos latinos, de por sí inestables”, afirma el autor, Fernando Cruz, Analista Senior en Euromonitor International.
De acuerdo con el documento, cuando los consumidores se enfrentan a una situación económica inestable, esperan seguir experimentando pequeños placeres a pesar de que la situación económica demande prudencia en el gasto.
En el Perú, en el año 2009, durante la crisis subprime, las ventas de los restaurantes de servicio completo crecieron 9.2%, una tasa mucho más alta que en los años anteriores, mientras que el PBI del país creció solo un 1.0%. Desde el año 2010 en adelante, cuando el peor momento de la crisis subprime había pasado, el desempeño de los restaurantes se realineó con la evolución de la economía peruana.
“Las compras indulgentes, que involucran el gasto en bienes no esenciales para ser disfrutados como un placer especial, funcionan como un alivio frente a las dificultades que los consumidores pueden experimentar,” continua Cruz. “La desarrollada cultura gastronómica peruana, que trasciende a las clases sociales, explica este fenómeno. Durante las crisis, las personas buscan pequeños momentos que actúen como refugio y usan la comida para desviar su atención de los problemas contingentes”.
Otras tendencias destacadas del reporte incluyen conveniencia, transparencia y nostalgia.