(Reuters).- Las bolsas chinas subieron hoy alentadas por las fuertes ganancias en Wall Street y las señales de un nuevo apoyo de Pekín después de un bache de cinco días que llevó el pánico a los mercados globales.
El índice CSI300, en el que cotizan las mayores empresas que cotizan en Shanghai y Shenzhen, subió un 4.3% a 3,342.29 puntos, mientras que el índice compuesto de Shanghai ganó un 4.9% a 3,232.35 puntos.
En la semana, el SSEC perdió 7.9% y el CSI300 cayó 6.9%.
Los fondos de pensiones locales de China comenzarán a invertir 2 billones de yuanes (US$ 313,050 millones) tan pronto como sea posible en acciones y otros activos, dijeron hoy altos funcionarios del gobierno.
Segunda intervención
En tanto, el Banco Central de China informó hoy que inyectó 60,000 millones de yuanes (US$ 9,390 millones) en los mercados interbancarios a través de operaciones de liquidez de corto plazo.
Los préstamos a siete días tienen una tasa de interés promedio de 2.35%, dijo el Banco Popular de China en su sitio web.
Esta es la segunda operación de créditos de este tipo durante esta semana.
La inesperada devaluación de la moneda en China a mediados de agosto y una encuesta que mostraba un deterioro de la actividad industrial ayudó a desencadenar una brusca ola vendedora que llegó a provocar un descenso de más del 20% en la bolsa en una semana.
Todos los principales sectores subieron el viernes.
Las acciones bancarias, que subieron ayer, mostraron un rendimiento inferior al mercado después de que grandes entidades financieras anunciaron esta semana cifras de beneficios que prácticamente no mostraban crecimiento junto con un incremento de las tasas de morosidad.