Bill Gates ha generado más noticia por su filantropía que por sus compras desmedidas pero existe una propiedad que permite conocer un poco más de los gastos excéntricos que ha realizado el multimillonario en los últimos años gracias a su fortuna de US$ 79,200 millones.
La mansión de Gates, rodeada por las aguas del lago Washington en Medina (Estados Unidos), alcanza los 6,131 metros cuadrados y tiene un valor cercano a los US$ 123 millones.
El palacete tardó siete años en ser construido y cuenta con 300 empleados.
El interior de la casa de Bill Gates cuenta con un total de 24 baños, seis cocinas, siete dormitorios, seis habitaciones con chimenea, un gran garaje subterráneo con calefacción en el que se pueden estacionar hasta 30 coches, un cine y una biblioteca en la que alberga una colección de libros entre los que destaca un manuscrito de Leonardo Da Vinci.
Además de la piscina interior y el gran gimnasio, en el exterior de la mansión de Bill Gates se encuentra una piscina construida con mármol de Carrara de veinte metros con hilo musical bajo el agua, un campo de golf con 18 hoyos y un jardín impresionante con un río artificial.
La casa de Bill Gates por dentro es pura tecnología, cada invitado que visita al creador de Microsoft en su mansión recibe un pin electrónico que registra todos sus movimientos, el tejado cuenta con tejas fotovoltaicas que le permiten utilizar así la energía del sol.