(Bloomberg).- El mexicano Carlos Slim está incrementando sus inversiones en España, donde otros multimillonarios como George Soros y Bill Gates también han hecho apuestas, en tanto se juega a que el país europeo podrá salir de la crisis del sector inmobiliario.
Slim, la cuarta persona más rica del mundo en el Índice de Multimillonarios de Bloomberg, el mes pasado efectuó una oferta por Fomento de Construcciones & Contratas SA, con sede en Barcelona, a través de su vehículo de financiamiento, Inversora Carso.
La medida culmina una serie de inversiones que Slim inició en el 2014 para apuntalar el balance de una de las constructoras más grandes de España. Como parte de la operación, Carso también realizó una oferta por el desarrollador de Madrid Realia Business SA, del cual FCC posee una participación del 37%, de acuerdo con los datos que reunió Bloomberg.
Slim, de 76 años, famoso por aprovechar los precios deprimidos cuando invierte en una compañía, ve la oportunidad de construir en momentos en que la economía española se recupera de una debacle de las propiedades provocada por la deuda que dejó al país con un excedente de 1.4 millones de viviendas.
España creció al ritmo más veloz en ocho años en 2015, superando el desempeño de sus pares europeos al afianzarse la recuperación económica. Mantuvo el impulso en el primer trimestre de este año, acelerando al 0,7 por ciento. La demanda de viviendas es vista como una de las fuerzas que fomenta el crecimiento.
Apuesta a la recuperación.
“Cuando Slim invirtió aquí por primera vez, la construcción y las propiedades estaban cerca de su nivel más bajo. Ahora apuesta a una recuperación”, dijo Carles Vergara, profesor de administración financiera de la IESE Business School de Barcelona. “Compró en buen momento y a buen precio, y lo que encontró en FCC fue una compañía sólida que puede crecer no sólo en la construcción sino también en los servicios urbanos”.
Conforme la economía española repunta, los inversores encuentran oportunidades de inversión en bienes raíces. Madrid fue el quinto mercado inmobiliario de Europa por su nivel de actividad en los doce meses que terminaron en octubre, lo que generó más de 5,000 millones de euros (US$ 5,690 millones) en transacciones, de acuerdo con un informe de PwC publicado este año.
La estrategia de Slim no está exenta de riesgos. Los bonos españoles sufren la racha bajista más larga desde el 2012 en medio de una creciente preocupación europea por las turbulencias políticas y datos económicos más débiles. Los políticos españoles aún no han podido formar gobierno desde las elecciones no concluyentes de diciembre, y el gobierno en funciones incumplió con su meta de déficit de presupuesto 2015.
FCC, cuyas raíces se remontan a 1900 en Barcelona, redujo sus pérdidas de 724.3 millones de euros en el 2014 a 46.3 millones de euros en 2015, gracias a un aumento de los ingresos provenientes de los mercados internacionales de 9.8%.
FCC se benefició con su exposición al negocio ambiental y de gestión del agua, que representó aproximadamente el 80% de sus utilidades antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización, declaró la analista de Renta 4 Carolina Morcos en una entrevista desde Madrid.
“Esta es una transición que hemos visto en las tres o cuatro compañías constructoras más tradicionales de España. De modo que con o sin una recuperación de las propiedades, la apuesta es mucho más estable”, agregó Morcos, que recomienda a los accionistas aceptar la oferta de Carso. “Vamos a ver una evolución positiva aquí”.