Cuando a mediados del 2012 la administración temporal (AT) tomó las riendas de Universitario de Deportes, se sentó a renegociar los contratos con cada uno de sus patrocinadores, excepto con Backus.
Rocío Chávez, presidenta de la AT, señala que intentaron de diversas formas entablar una conversación, pero no hubo resultados, tampoco los obtuvo para la campaña del 2013.
Situación complicada
El conflicto entre ambas partes ha sufrido una escalada que podría terminar con la relación comercial, advierte Ayar López Cano, directivo de Universitario de Deportes.
El propio dirigente afirma que el tema deportivo se ha cruzado con el económico. Recuerda que poco antes de que acabara el Descentralizado, un jugador de la “U” fue sancionado por la Comisión de Justicia de la Asociación Deportiva de Fútbol y suspendido una fecha por un incidente con un futbolista de Inti Gas.
No obstante, José Luis Noriega, presidente de la Comisión de Justicia de la Federación Peruana de Fútbol (que es la última instancia en estos casos), intervino y afirmó que la suspensión debió ser de seis fechas, relata la actual administración temporal de la “U”.
“Adelantó opinión”, dice Rocío Chávez, y añade que al día siguiente Sporting Cristal apela y pide la máxima sanción al jugador de la “U”.
“Fue una sorpresa para nosotros, porque Cristal no era parte involucrada en el caso. Eso fue la gota que derramó el vaso”, dispara López Cano. Al final, y ante la intervención de la “U”, el club rimense retiró la apelación. Por todo este caso, Universitario envió una carta notarial a la propia Backus.
Conflicto
Chávez analiza la situación al extremo. “Backus junto a Sporting Cristal pertenecen a un solo grupo económico que es SABMiller, son dos hermanos que se rigen bajo el mismo código de ética, en el que se señala que no debe haber conflictos de intereses entre las empresas y todos los terceros vinculados a ellas. En ese caso está la U”, precisa.
Agrega que Backus es el sponsor del equipo desde hace ocho años. “Si es mi auspiciador cómo puede actuar contra mí”, se pregunta. En este sentido, Chávez recuerda el incidente con la Comisión de Justicia de la FPF. Y otra vez da un paso más allá, pues sostiene que no pueden tener un auspiciador que atente contra el club.
“La relación comercial con Backus no es conveniente con Universitario”, añade López Cano. “Un club de fútbol, que juega en el campeonato, no puede tener como sponsor a una empresa que al mismo tiempo es propietaria de un club que juega en contra de ti. Hay un conflicto de intereses terrible”, complementa Chávez.
Arbitraje
El contrato con Backus es por un monto anual de US$ 250 mil y en una de sus cláusulas dice que ante cualquier conflicto, las partes podrán acudir a un arbitraje.
Para Rocío Chávez, hay un problema y es el conflicto de intereses que existe, lo que ha provocado que el sponsor no dé un apoyo absoluto al club. “El contrato no se estaría cumpliendo, pero ellos dicen que sí. Tenemos un conflicto”, precisa.
La “U” ya nombró a Óscar Vidal como árbitro y Backus a Eduardo Roy Freire. Ahora ambos deberán elegir a un tercero.
Nuevo contrato
Ambos dirigentes coinciden en que en más de una oportunidad Backus prometió que renegociarían las condiciones del contrato. Chávez remarca que se respetará el mismo, que vence en diciembre del 2014.
El acuerdo implica, además, que la “U” está obligada de comunicar a la Backus si hay interés de otra compañía por ser un sponsor. “Pensamos que no podemos seguir con un auspiciador de este tipo que nos maltrata”, afirma Chávez.
“Cómo renegociar mejores condiciones con alguien que tiene conflictos de intereses, lo mejor que podría pasar es que termine el contrato (…) El tema no parte por renegociar el contrato, sino que termine este y empezar otro nuevo o que llegue otro auspiciador. No olvidemos que existe conflicto de intereses, que esto constituye abuso del derecho”, detalla Rocío Chávez.
Ayar López Cano sostiene que en Backus le han manifestado “que en el futuro van a separar totalmente a Sporting Cristal de la compañía, incluso con un cambio de nombre para que no tenga vinculación con SAB Miller”. “Con ello romperían el principio del conflicto de intereses”.
La deuda concursal y US$ 150 mil: el otro conflicto
Durante cuatro meses directivos de Backus y de la administración temporal (AT) de Universitario de Deportes se sentaron a discutir por el pago o no de US$ 150 mil de parte de la cervecera al club crema.
La historia comienza cuando la compañía le adelantó dicho monto a la administración anterior de la “U”. Se trataba de un pago como parte de los US$ 250 mil anuales que da Backus a la “U” como sponsor, señala Ayar López Cano.
Cuando la AT ingresa al club, pide a Backus pagar los US$ 150 mil, pues estos debían pasar a ser parte de la deuda concursal. “No fue un préstamos como sí sucedió con Telefónica”, añade el directivo.
Al ser una deuda concursal, la “U” tendrá que pagarla, pero estará en el cronograma de pago de acreencias que se fijará con Indecopi, recuerda Rocío Chávez. Finalmente, Backus admitió que sí debía pagar. “Pero ya pasó más de un año y no nos pagan”, señala López Cano.