Tokio (Reuters).- Toyota Motor Corp y BMW AG investigarán juntas una batería de litio-aire que sería más poderosa que las baterías litio-ion usadas en muchos vehículos híbridos y eléctricos, anunciaron ambas automotrices.

Las dos compañías dijeron también que trabajarán en un sistema de celdas de combustible para vehículos, que incluye un tanque de hidrógeno y el motor, con miras al 2020.

El fortalecimiento de la sociedad entre Toyota -la automotriz de más ventas en el mundo- y BMW -líder en el mercado automotriz de alta gama- les permitirá a las dos compañías recortar costos de desarrollo en momentos en que se intensifica la competencia global en el sector.

“Para que se usen más los FCV (vehículos de celda de combustible, por su sigla en inglés), se necesita que el sistema sea más barato. Eso requeriría mucho tiempo y costos de desarrollo”, dijo el vicepresidente de Toyota, Takeshi Uchiyamada, que encabezó el desarrollo del coche híbrido más vendido, el Prius, a fines de la década de 1990.

“Al unir la sabiduría de las dos compañías, podemos trabajar para que los FCV se vuelvan más populares más rápido”, dijo Uchiyamada en una conferencia de prensa con BMW en la ciudad japonesa de Nagoya.

Toyota dijo que quería presentar un nuevo vehículo con sistema de celda de combustible para alrededor del 2020 usando la tecnología desarrollada en conjunto, mientras que BMW dijo que no había tomado una decisión sobre la fecha de lanzamiento. Toyota apunta a vender un sedán con celda de combustible para alrededor del 2015.

Toyota usa baterías de litio-ion en su híbrido Prius, en algunos Prius v, y en el auto eléctrico eQ.

El ánodo de las baterías de litio-aire se llena con litio, y el cátodo con aire. Teóricamente, la batería puede generar y almacenar más electricidad que las ya existentes baterías de litio-ion.

La tecnología está siendo estudiada por varios investigadores, entre ellos IBM, que está desarrollando una batería de litio-aire que permitirá que los vehículos eléctricos recorran 800 kilómetros con una carga.

Toyota y BMW también dijeron que trabajarán en una plataforma y tecnología compartidas para autos deportivos de mediano tamaño, y que desarrollarán tecnologías para fabricar autos más livianos y por lo tanto con un consumo más eficiente de combustible.