A su llegada a Lima, Steve St. Angelo compartió con Gestión sus expectativas en el Perú y la región, en un contexto de cambios en el mercado.

¿Cómo ha sido el desempeño de Toyota en la región?
Desde el 2013, el mercado de América Latina cayó alrededor de 40% pero Toyota ha duplicado su participación de mercado, pasando de alrededor de 5% a 10%, y hemos crecido en el 2016 un 4%.

¿Observa señales de recuperación en las ventas?
La situación en Brasil se está estabilizando, hemos visto una tendencia positiva en la confianza desde que terminaron las Olimpiadas. Igual en Argentina con el nuevo presidente, y en el Perú también se siente estabilización después de las elecciones.

¿Cuál es su perspectiva para el Perú en los próximos meses?
El país se está orientando a la mejora en infraestructura, y cuando las obras comienzan a caminar se empieza a comprar vehículos, camiones. Eso genera influencia positiva en el público, en general, esperamos una mejora en el segundo semestre.

A inicios de año, Toyota nombró nuevos ejecutivos, incluyendo al CEO para el Perú, ¿a qué se apunta?
Hacemos rotaciones periódicamente. Toshiro Hayashi toma el liderazgo en el Perú, ha pasado mucho tiempo de su carrera en la región, conoce bien la cultura y será bueno para el Perú; el otro anuncio fue de Rafael Chang, un peruano como nuevo presidente de Toyota en Brasil.

Desde la sede regional, ¿cómo ven al Perú, donde Toyota está cumpliendo 50 años?
Como una de las principales operaciones, porque en el Perú está el market share más alto de Toyota en la región y lo ha sostenido por 25 años, lo que habla de la lealtad de los peruanos a la marca.

Así, ¿aún ven espacio para mejoras en el plano comercial y/o de productos?
En el Perú y en América Latina hay muy poco conocimiento y reconocimiento de la tecnología híbrida, que es muy aceptada en EE.UU., Europa y Japón. En nuestra región, menos de 1% de los vehículos vendidos son híbridos y, en el futuro, los motores de gasolina o diésel van a desaparecer.

¿Cuáles son las metas de ventas para la región en el 2017?
No podemos predecir el futuro, pero tenemos mucha confianza. La población llegará a 678 millones en la región al 2020, necesitarán vehículos, es un indicador positivo. Hoy, por cada 10 personas en EE.UU., 8 tienen auto; en la región, 1.6; en el Perú, 1. Ello nos hace tener proyecciones positivas.

¿Están listos para atender a ese creciente público?
Toyota está comprometida con América Latina y el Perú, tanto que seguimos invirtiendo. En los últimos dos años, se ha invertido US$ 2,000 millones. Nuestras plantas en Brasil y Argentina tienen lo último como en Japón; y justo hace unas semanas se anunció una expansión de la planta de motores en Brasil.

¿Observan nuevos proyectos para aumentar la producción de vehículos?
No tenemos muchos planes de aumentar producción, pero tenemos la filosofía de construir vehículos cerca de donde son vendidos. Si nuestras ideas y proyecciones son correctas, por supuesto que necesitaremos mayor producción en la región.

Ahora que los proyectos en México son inciertos ante las medidas de EE.UU., ¿otros países serán protagonistas?
Argentina y Brasil tienen volúmenes grandes, pero no nos enfocamos solo en ellos, sino en todos los países de la región. Hay algunos no tan grandes, pero ahí estamos.