(Bloomberg) Ryanair Holdings Plc está trabajando en una serie de acuerdos que daría a la aerolínea de vuelos de bajo coste el control de una mayor cuota de los viajes europeos de corta distancia.
La compañía, con sede en Dublín, busca tratos con aerolíneas que incluyen a Norwegian Air Shuttle ASA, Aer Lingus, Alitalia SpA y Deutsche Lufthansa AG según los cuales los vuelos de Ryanair ayudarían a transportar pasajeros para los servicios de larga distancia de estas compañías.
Ryanair estaría dispuesta a incrementar la frecuencia para ofrecer suficiente conectividad y en última instancia podría reemplazar muchos servicios de corta distancia operados por aerolíneas de red, alentándolas a concentrarse exclusivamente en trayectos intercontinentales, dijo el máximo responsable ejecutivo, Michael O’Leary.
“La ventaja para nosotros está en persuadir a las aerolíneas tradicionales a desistir de competir con nosotros en la corta distancia porque nutre su larga distancia”, dijo. “Trabajen con nosotros en la corta distancia, pierden menos dinero, yo tendré menos competencia”.
Ryanair busca lograr acuerdos a tiempo para su calendario estival en el Hemisferio Norte, con modificaciones por las cuales los pasajeros probablemente reserven sus vuelos para el destino final a través de los sitios web de las aerolíneas de larga distancia, pero con los viajes del tramo europeo en los aviones de la empresa irlandesa.
El equipaje se transferiría de manera automática, si bien los acuerdos probablemente omitan incluir términos de código compartido, según los cuales las aerolíneas venden billetes para vuelos de las otras como si fueran propios.
No es un fraude
“Sólo hay ventajas para las aerolíneas tradicionales en esto, con la excepción de que hay que persuadirlas de que no es un fraude”, afirmó O’Leary.
Las aerolíneas europeas están lidiando con una caída de los márgenes después que el bajo precio del crudo motivó un derroche de capacidad que causó el desplome de los precios.
Ryanair dijo esta semana que sus tarifas han caído 16% este invierno boreal y seguirán cayendo, lo que dificulta aún más que las aerolíneas de servicio completo registren una ganancia en rutas marginales.
O’Leary menciona el negocio de corta distancia de Aer Lingus en Dublín para ilustrar cómo funcionaría el plan de conexión a vuelos de otras aerolíneas.
Las aerolíneas compiten directamente en 28 servicios, dijo, y si bien Ryanair no buscaría tomar rutas de larga distancia, un acuerdo permitiría que la división de IAG SA ceda operaciones periféricas no rentables al tiempo que conectaría a 85 destinos ofrecidos por su rival de descuento, entre ellos Birmingham y Edimburgo.
Acuerdos
El máximo responsable dijo que ha ofrecido acuerdos similares a Alitalia en rutas desde Roma y Milán.
“Es una demostración de cómo podemos transferir pasajeros a una aerolínea tradicional”, dijo. “Si podemos hacerlo en Dublín, ¿por qué no podemos en Italia, por qué no, en definitiva, hacerlo en Alemania con Lufthansa? Este es totalmente el camino a seguir para el sector”.
Ryanair busca transportar 200 millones de pasajeros para el 2025, frente a 117 millones el año pasado, y O’Leary dijo que al menos 10% del total, o 20 millones de clientes, probablemente deriven de acuerdos de conexión a otras aerolíneas.