Perú es el segundo país con mayor cantidad de emprendimientos en latinoamérica (quintos a nivel mundial). Sin embargo, la alta mortandad de las mypes indica que muchos emprendedores no están preparados para lidiar con algunos aspectos de la vida empresarial.
“La mortalidad de las empresas es de muy corto plazo, hablamos de un año o dos”, señala Gwendolyn Sánchez, coordinadora del Sistema de Incubación de Empresas de la PUCP.
El aspecto más importante para asegurar una saludable vida empresarial, según la experta, es la adecuada preparación. “El fracaso se debe principalmente a la falta de un buen estudio de mercado, expectativas de rentabilidad que no se ven cubiertas y la falta de vocación por el rubro elegido, ya que eso les dificulta perseverar”, añade.
Para aprovechar la alta Tasa de Actividad Emprendedora del país (28,8%), se han desarrollado proyectos de Incubadoras destinadas a asesorar a los emprendedores en sus iniciativas, desde la búsqueda de fondos hasta la ejecución de trámites de formalización y creación de redes de contactos.
“Nosotros convocamos a quienes tienen una idea de negocio y hacemos un acompañamiento para que sean empresas formales y sostenibles, que no mueran en un corto plazo. Brindamos capacitaciones y los ayudamos a mantener una red de contacto con personas que los puedan ayudar a fortalecer su idea de negocio. En el caso de los Fondos, ellos tienen la oportunidad de hacer su modelo de negocio, evaluar sus factores críticos de éxito y hacer una sustentación ante un jurado para recibir feedback sobre cómo mejorar su propuesta, así están preparados para concursar por Fondos como los del FINCyT, Innovate Perú o Start up Perú ”, explica Sánchez.
En el país, la Asociación de peruana de incubadoras empresariales – Perú Incuba, cuenta con 18 instituciones asociadas con el fin de ayudar a los emprendedores en sus iniciativas. Cada institución maneja sus fechas de convocatorias así como los criterios de selección de proyectos. Actualmente se encuentra abierta la convocatoria para el CIDE PUCP.
“Nuestra convocatoria esta dirigida a emprendedores que tengan entre 20 a 45 años de edad, que no tengan negativo en la central de riesgo y que tengan una idea de negocio con bastante potencial de innovación”, invita Sánchez. La preinscripción esta abierta hasta el 5 de agosto.