Tras semanas de rumores, Repsol confirmó que aceptó los US$ 5,000 millones del Gobierno de Argentina por la expropiación de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), poniendo fin a la crisis diplomática entre España y el país sudamericano.
El consejo de administración de la petrolera ratificó por unanimidad el acuerdo con el Gobierno de Cristina Fernández luego de meses de negociación. Los US$ 5,000 millones, menos de la mitad de lo que exigió Repsol en un primer momento, son deuda reconocida por Argentina y se pagarán en bonos del Estado.
En un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores de España, Repsol informó que Argentina emitirá bonos por US$ 6,500 millones para asegurar que el precio de mercado no sea inferior a US$ 4,670 millones. A partir de ese momento, la compañía puede optar por cobrar ese dinero en caja o esperar al vencimiento de los bonos dentro de 12 años.
Repsol dijo que la forma de ejecutar la operación se tomará en función del mercado, pero que en cualquier caso el acuerdo “obliga” al país latinoamericano a satisfacer el monto mencionado.
El acuerdo, que todavía debe ser ratificado por el Congreso argentino, se produce en momentos en que su Ejecutivo parece decidido a saldar cuentas pendientes para regresar a los mercados de capitales y conseguir dólares en medio de una fuerte caída de sus reservas internacionales.
Por otro lado, la petrolera española reportó un pérdida neta de US$ 1,400 millones en el cuarto trimestre, tras amortizar los activos expropiados por el Gobierno argentino.