(Bloomberg).- El futuro viajero a Londres, París o Jerusalén podría fácilmente planear un paseo en el momento, evitando el cambio de divisas y colocándose sus visores de realidad aumentada para ver cómo lucían los estrechos callejones del casco antiguo de la ciudad hace 200 años.
Así es el futuro imaginado por Maelle Gavet, vicepresidenta ejecutiva del grupo de operaciones de Priceline Group, en un mundo donde la gente ya no debe comprar pasajes seis meses por adelantado y los millennials, el mercado de mayor crecimiento, llegan a un destino con una vaga noción de lo que quieren hacer.
“La palabra clave del sector de viajes ahora es ‘explorar’”, dijo Gavet, agregando que Priceline, a través de Booking.com, desplegó un nuevo producto para smartphones llamado Booking Experiences en julio en Ámsterdam, que ayuda a los turistas en cierta forma a lograrlo.
Booking Experiences funciona dentro de las aplicaciones locales para smartphones de Booking.com, enviando notificaciones a los dispositivos de los viajeros mientras pasan frente a atracciones, preguntándoles si desean reservar una entrada y evitar las filas. La semana pasada, Booking Experiences se puso en marcha en París, Roma, Londres y Dubái. El lanzamiento en Nueva York y Orlando está planificado para fines de este año.
“Estamos viendo interés en el producto hasta ahora. Más y más clientes lo están aprovechando”, informó la compañía en un comunicado enviado por correo electrónico.
Priceline está trabajando para mantener el crecimiento de los ingresos reportado en los últimos dos trimestres y enfrentar los desafíos que incluyen a nuevos actores como el aumento de la presencia de Google en el mercado, mientras la tecnología juega un rol mayor en la forma en que la gente joven organiza sus viajes.
Se espera que los usuarios entre 17 y 34 años inviertan más dinero en servicios de viaje durante el 2017 que cualquier otro grupo etario, anunció Expedia Media Solutions en un artículo de blog en febrero. Un estudio de Priceline reveló que casi la mitad de los millennials del mundo usan dispositivos digitales para previsualizar un destino al que planean viajar.
“La realidad aumentada permitirá que la gente vaya a una ciudad y, mientras camina por los alrededores, obtenga información en sus gafas. Y, en cierto momento, mientras pasa por una construcción, las gafas podrán mostrarle la manera en que lucía el lugar en que está hace 200 años, creando un nivel completamente nuevo del turismo”, dijo Gavet.
El software de inteligencia artificial también está ayudando al sector de turismo a “proporcionar contenidos relevantes para un usuario específico y permite un proceso de reserva más fluido”, dijo Gavet. Un listado automático solo de hoteles o pasajes en avión dentro del rango de precios del usuario es un ejemplo de esto.
Con la tecnología a la vanguardia del sector, las startups de viajes recaudaron US$ 1,000 millones en el tercer trimestre de este año hasta el 21 de setiembre, un repunte de un 72% sobre el trimestre anterior, según una entrada de blog de CB Insights de la semana pasada. Entre las empresas más financiadas están AirBnB, que recaudó US$ 555.5 millones este mes, y el motor de búsqueda de vuelos Skyscanner, startup unicornio británica con sede en Escocia.