París (Reuters).- La complicada fabricante de automóviles PSA Peugeot Citroen dijo que invertiría más de 750 millones de euros (937 millones de dólares) para construir sus futuros vehículos comerciales livianos en su planta de Sevelnord, para asegurar el futuro de su instalación en el norte de Francia.
Peugeot, el segundo mayor fabricante de autos de Europa, actualmente opera la planta de Sevelnord junto con Fiat, pero el futuro de la instalación quedó en duda cuando el grupo italiano decidió retirarse del emprendimiento y finalizar la producción de su modelo Scudo.
Bajo los planes anunciados por Toyota en julio, Peugeot fabricará una variante de sus vans de tamaño medio y sus reemplazos futuros para el fabricante japonés. “La decisión del grupo asegurará el futuro de la instalación”, dijo Peugeot en un comunicado. “Representa una inversión total de más de 750 millones de euros, de los cuales más de 400 millones serán dedicados a investigación y desarrollo”.
Un portavoz de PSA dijo que Toyota financiaría parte de la inversión, pero no entregó mayores detalles.
En julio, Peugeot, ya recortando más de 10,000 empleos locales y cerrando una fábrica cerca de París, convenció a la mayoría de los sindicatos de Sevelnord a aceptar una reducción de licencias e incrementar la flexibilidad de los horarios de trabajo.
Sin las concesiones, la compañía había dicho que hubiera elegido una planta española para construir los reemplazos del las vans comerciales Peugeot Expert y Citroen Jumpy ensambladas en Sevelnord, lo que habría llevado al cierre de la instalación en Francia en el 2016.
PSA es el productor líder en Europa de vehículos comerciales livianos, con un 20.8% de participación de mercado en el primer semestre del 2012.
Sevelnord ensambló 94,000 vans el año pasado, de las cuales 20,000 fueron para Fiat y el resto para las marcas Peugeot y Citroen.