Ciudad del Vaticano (Reuters).- El Papa Francisco dijo que fortalecerá la supervisión al Banco del Vaticano para evitar el blanqueo de capitales o la financiación del terrorismo, como parte de su campaña para limpiar la entidad después de décadas de escándalos.
Mediante la emisión de un “Motu Proprio” -un decreto de propia iniciativa del pontífice-, Francisco dijo que el organismo de control interno del Vaticano, la Autoridad de Inteligencia Financiera (FIA), aumentaría los poderes de supervisión sobre el banco y otros departamentos de la Santa Sede que participan en actividades financieras.
La decisión dará lugar a un control más estricto del Instituto para las Obras de Religión (IOR) -el nombre formal del Banco del Vaticano- y responde a una recomendación sobre la lucha contra el lavado de dinero entregada el año pasado por el comité de expertos europeos Moneyval.
El Vaticano está tratando de cumplir con los estándares internacionales en el combate contra delitos como el lavado de dinero, la financiación del terrorismo y la proliferación de las armas de destrucción masiva.
Moneyval dijo en un informe en julio de 2012 que el Vaticano todavía tenía mucho camino por recorrer en esta materia. El comité de expertos dijo que entre los poderes de la FIA deben estar la revisión de políticas, procedimientos, cuentas y registros.
El decreto de Francisco amplía la aplicación de las leyes del Vaticano a los departamentos de la Curia romana, o de la administración central, y a otras instituciones dependientes de la Santa Sede, así como a las organizaciones sin fines de lucro con sede en la Ciudad del Vaticano.
Asimismo, establece un “Comité de Seguridad Financiera” para coordinar los esfuerzos para prevenir el blanqueo, la financiación del terrorismo y la proliferación de armas, dijo el Vaticano.
El Papa Francisco ha hecho de la limpieza en la administración del Vaticano uno de sus objetivos centrales desde que fue elegido en marzo de este año. El pontífice ha llevado a la Santa Sede a expertos internacionales para que lo asesoren en asuntos económicos, la mejora de la transparencia y el reforzamiento de los principios de contabilidad.
Francisco también creó una comisión especial de investigación para reformar el IOR. En julio, el Papa dijo que el banco debe ser “honesto y transparente”.