El Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) informó que inició un proceso de investigación para determinar las causas y responsabilidades en el derrame de petróleo reportado, el pasado 2 de noviembre, en el Kilómetros 103+442 del Tramo I del Oleoducto Norperuano, ubicado en el distrito de Lagunas, en Loreto.
Asimismo, el regulador supervisa la aplicación del Plan de Contingencias de Petroperú, que a raíz de este incidente decidió declararse en emergencia.
En el marco de sus competencias, Osinergmin fiscaliza el cumplimiento de las leyes y normas del subsector hidrocarburos; por ello, iniciará los procedimientos administrativos sancionadores que correspondan, en caso de comprobarse incumplimientos a la normativa.
“Las operaciones en el Oleoducto Norperuano se encuentran suspendidas, luego que Osinergmin emitiera mandatos que obligan a Petroperú a realizar acciones que garanticen la integridad y seguridad de las operaciones del ONP”, recordó.
Octavo atentado--
Según Petroperú, en la mañana de ayer se produjo este incidente en el área del oleoducto que se ubica en las inmediaciones de la Comunidad Nativa Naranjal en el distrito de Lagunas, donde se produjo una fuga de petróleo como consecuencia del octavo atentado realizado por terceros en lo que va del año.
“Nuestros equipos de emergencia ya controlaron la fuga instalando una grapa en el ducto y colocando las barreras de contención en el canal de flotación”, dijo la petrolera estatal.
Explicó que esta situación afecta adversamente el patrimonio de la empresa y los intereses del país, y por eso el Directorio acordó declarar en emergencia a la compañía hasta que se logre garantizar la seguridad e integridad de nuestra infraestructura.
Para asegurar la integridad del oleoducto, Petroperú está coordinando con el Gobierno el patrullaje y supervisión de nuestras instalaciones por parte de las fuerzas de orden a lo largo del derecho de vía en donde está instalado el oleoducto.
Además está contratando un sistema de video vigilancia aérea de alta tecnología (drones), para la detección de elementos que afecten la integridad del ducto.
“Estamos demandando a las autoridades competentes que aceleren los procesos de investigación correspondientes, a fin de identificar a los responsables de estos gravísimos hechos y que se les impongan drásticas sanciones por haber atentado contra el patrimonio nacional”, añadió.
Otra medida es implementar, en el más breve plazo, el programa Guardianes del Oleoducto como mecanismo de integración de las comunidades en resguardo de las instalaciones de dicha infraestructura.
“La empresa continuará realizando sus mejores esfuerzos para salir de esta crisis teniendo como sus principales objetivos el de contar con un oleoducto eficiente en operación, una refinería rentable y una estructura organizacional competitiva”, anotó.