La planta de producción de Ladrillos Pirámide (CEPERSA), ubicada en Carabayllo, será modernizada de acuerdo al plan estratégico de la empresa, según refirió su gerente general, Raúl Berrios.

Este detalló que la modernización implicará automatizar el proceso de producción de ladrillos y la ampliación de su cartera de productos. Ante lo cual, han destinado un presupuesto de US$ 80 millones para los próximos cinco años.

“Para el 2017, Ladrillos Pirámide no solo tendrá ladrillos con su marca, también ingresarán al mercado peruano con tejas, baldosas, pisos y cerámicos de colores”, refirió el ejecutivo.

Con ello, esperan duplicar sus ventas en un futuro cercano. Dado que la producción actual de ladrillos es de 6,500 toneladas al año, así que con esta estrategia, esperan crecer entre un 15% y 20%.

“Hay un segmento importante de público que reconoce nuestra marca y exige que le brindemos más opciones de acabados, por eso estamos innovando con el objetivo de satisfacer sus demandas”, explicó el ejecutivo.

En esa línea, señaló que realizarán 12 lanzamientos para fines de este año y fortalecerán su sistema de distribución de sus canales directos.

“Apostamos por la tecnología en la planta de Carabayllo tanto para el proceso de adquisición de materias primas como para dar soporte y mejorar la cadena de valor. Con todas las mejoras, esperamos crecer un 30% en ventas de ladrillos este año”, proyectó Berrios.

Hacia la autoconstrucción

En ese camino, el ejecutivo de la peruana aseguró que la nueva estrategia de la empresa, esta complementada con la incursión al mercado local de productos dirigidos a la autoconstrucción.

“Este paso es importante y la automatización de la planta es primordial porque queremos estar alineados con las nuevas tecnologías y con el cuidado del medio ambiente”, apuntó Berrios.

Adelantó que, se ha contemplado también, la construcción de nuevas plantas de producción de sus ladrillos al interior del país desde el 2017, dado que actualmente abastecen a Lima y a ciudades del norte y del sur, pero su meta es descentralizar la producción.

Con ellos, el producto llegaría en menos tiempo a su destino.