(Reuters).- Cuando Hewlett Packard adquirió Autonomy el año pasado por US$ 11,100 millones, unas 15 firmas financieras, legales y contables estuvieron involucradas en la transacción, pero ninguna alzó la voz para denunciar lo que HP definió el martes como un gran fraude contable.
HP sorprendió a Wall Street con denuncias sobre su unidad británica de software y asumió un cargo de US$ 8,800 millones, en el último de una serie de reveses para la ilustre compañía.
HP dijo que había descubierto -a través de un informante- “irregularidades, tergiversaciones y fallas de declaración” y “un deliberado esfuerzo de Autonomy por engañar a los accionistas”.
Su presidenta ejecutiva, Meg Whitman -directora de la empresa al momento del acuerdo-, dijo que la junta directiva había confiado a la firma contable Deloitte los procedimientos de registro financiero de Autonomy y que posteriormente KPMG fue contratada para auditar a Deloitte.
HP tuvo varios otros asesores: la banca de inversión Perella Weinberg Partners como el principal, junto a Barclays. Asesores bancarios de ambas partes del acuerdo recibieron pagos por US$ 68,8 millones, según datos de Thomson Reuters/Freeman Consulting.
Barclays se llevó los mejores honorarios por la transacción con US$ 18,1 millones, mientras que Perella recibió pagos por US$ 12 millones. Los asesores legales de HP incluyeron a Gibson, Dunn & Crutcher; Freshfields Bruckhaus Deringer; Drinker Biddle & Reath; y Skadden, Arps, Slate, Meagher & Flom, que asesoró a la directiva.
Del lado de Autonomy estuvo la firma Qatalyst Partners, de Frank Quattrone y especializada en acuerdos de tecnología, que se llevó US$ 11.6 millones.
UBS, Goldman Sachs, Citigroup, JPMorgan Chase y Bank of America también asesoraron a Autonomy y embolsaron IUS$ 5.4 millones cada uno. S laughter & May y Morgan Lewis sirvieron como consejeros legales de la compañía.
Aunque reguladores en Estados Unidos y el Reino Unido, y también el FBI, probablemente tardarán varios meses o años en investigar lo que sucedió, expertos legales dijeron el martes que no estaba claro si alguno de los asesores sería considerado responsable.
Las empresas legales y los banqueros argumentarían que no fueron contratados para revisar la contabilidad y que confiaron en la opinión de los auditores, según indicaron expertos legales.
Muchas fuentes con conocimiento de la transacción HP-Autonomy señalaron que los bancos de renombre que asesoraron a Autonomy aparecieron días antes de la concreción del acuerdo final.
Las fuentes dijeron que los bancos fueron elegidos en base a su larga relación con las empresas, en una práctica poco examinada de Wall Street de buscar bancas que tienen poco que ver con el acuerdo.