El gerente general de Graña y Montero Mario Alvarado Pflucker dijo la mañana del viernes que Odebrecht engañó a su empresa, a los bancos y otras instituciones, pero que su asociación con la empresa brasileña se debió a que las bases de los concursos públicos no les permitían participar solos.
“No es consuelo. Es al revés, es una pena decir que hemos sido engañados nosotros, han sido engañados los bancos e instituciones de todo tipo en este proceso.”, comentó Mario Alvarado. “No crea que me siento bien estando acá diciendo lo que estoy diciendo. No me siento bien, no me siento una persona aguda, inteligente, capaz, me siento muy mal”, añadió en entrevista con RPP Noticias.
Cierre difícil
Al igual que la española Enagás, socia en el consorcio GSP, que dijo más temprano hoy viernes, que ambas empresas han constatado que el cierre financiero no ocurrirá antes del límite del 23 de enero, Alvarado Pflucker coincidió en que es muy difícil que en esta etapa se pueda conseguir financiamiento para el proyecto.
“Ha llegado a la situación en que estamos al final, es muy difícil hoy día que podamos conseguir, no habiendo podido sacar a Odebrecht del proyecto,un financiamiento”, fueron sus palabras.
En caso de revocarse la concesión, y que el estado tenga que subastar el proyecto, en el orden de prelación (prioridad del pago de capital), están primero los bancos, luego Graña y Montero y “al final si queda algo le quedará a Odebrecht”.
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No había forma
El ejecutivo dijo que no había forma de estar enterados del mecanismo de pago de coimas que articulaba Odebrecht. “Ellos tenían una organización que nadie conocía, ni sabía que existía en Brasil o acá, que acaban de descubrir en todo el mundo. [Los socios] no había forma de estar enterados [ sic ], si no era en el Perú”, dijo.
Además, señaló que Odebrecht, como socio controlador, no permitía que Graña tuviera gerencias financieras, legales o logísticas. “Nuestra labor era básicamente de ejecución de obras”, dijo.
Entre 2005 y 2014, Alvarado Pflucker estimó que el 4% de la facturación de GyM provino de una relación con Odebrecht. Asimismo, dijo que en ese período solo participaron en seis proyectos de más de 50 en los que estuvo Odebrecht. “El 83% de nuestros ingresos viene del sector privado. La parte pública nuestra es muy poca”, indicó Alvarado Pflucker.
¿Concurso dirigido?
No obstante, indicó que las Bases de la licitación exigía requisitos que solo podían cumplir las empresa extranjeras.
“Nos asociamos por las bases. No nos permitían participar las Bases (de los Concursos), solos, y teníamos que participar con empresa que calificaran. No siempre habían empresas dispuestas a todos los proyectos”, comentó.
Mala decisión
El CEO de GyM recalcó, como la semana pasada ante un semanario, que fue una “mala decisión” asociarse con Odebrecht.
“No teníamos conocimiento de ningún acto de corrupción en nuestros proyectos. Nuestra asociación con Odebrecht nos está afectando mucho. Para mí es muy difícil estar acá, representando a más de 30,000 colaboradores del Grupo GyM”, dijo Mario Alvarado.