Tokio (Reuters).- Panasonic, el fabricante japonés de la marca de televisores Viera que atraviesa dificultades económicas, posee más de 10 millones de metros cuadrados en oficinas y fábricas, dormitorios para sus empleados e instalaciones deportivas para sus equipos de rugby, béisbol y atletismo femenino.
Mientras batalla por seducir a las carteras de los compradores navideños de la temporada de fin de año, el grupo de electrónica también busca compradores para algunas de esas propiedades que le permita reducir sus costos fijos y mejorar su flujo de caja en un momento de intensa competencia, en concreto con rivales surcoreanos como Samsung Electronics.
Otros fabricantes japoneses de televisores en problemas, Sony y Sharp, también venderán edificios y negocios en una operación gigante que podría recaudar un total de 3,000 millones de dólares (unos 2,320 millones de euros).
Panasonic planea obtener 1,340 millones de dólares al desprenderse de propiedades y acciones en otras empresas japonesas para finales de marzo, dijo a Reuters el director financiero del grupo, Hideaki Kawai.
“Tenemos muchos terrenos y edificios en Japón y fuera”, dijo en una entrevista en la sede de la empresa en Osaka, en el oeste de Japón. Declinó enumerar qué propiedades saldrían a la venta, pero dijo que la mayoría están en Japón.
En el lote se incluye un edificio de 24 plantas en el centro de Tokio -construido en 2003, con 47,300 metros cuadrados donde trabajan unos 2,000 empleados de Panasonic- dijo una fuente familiarizada con el plan a Reuters.
Kawai añadió que Panasonic obtendría una cuarta parte de los fondos deshaciéndose de acciones en otras empresas.
Estas medidas ayudarán a impulsar el flujo de caja a 200,000 millones de yenes (2,430 millones de dólares) para el año empresarial que se cierra en marzo, dijo Kawai, y permitirán a Panasonic reducir su deuda y mantener su esfuerzo crucial en investigación y desarrollo mientras remodela su catálogo de negocio.