(Bloomberg).- Freeport McMoRan Inc. está poniendo a prueba el coraje de la industria del cobre, y el de sus propios inversores, con una expansión que podría convertir a la empresa en el mayor productor del mundo en momentos en que el crecimiento chino se desacelera.
La compañía con sede central en Phoenix salvará la distancia que la separa del actual N° 1, Codelco, el año que viene tras ampliar minas en Perú y los Estados Unidos en tanto a la compañía estatal chilena se le agota el mineral rentable en una mina del Desierto de Atacama.
Para quienes pronostican una caída de la demanda más marcada conforme China pasa a una economía basada en el consumo, el crecimiento de Freeport no tiene mucho sentido.
Pero, para la compañía –cuyo presidente de 74 años, Jim Bob Moffett, supervisó el descubrimiento del yacimiento de cobre y oro más grande del mundo en las selvas de Indonesia hace 27 años- las minas viejas de la industria tendrán dificultades para hacer frente incluso a una demanda mundial moderada.
Es una opinión que comparten Goldman Sachs Group Inc., Morgan Stanley y Macquarie Group Ltd., quienes vaticinan faltantes a partir de comienzos del 2017.
“Están haciendo la apuesta correcta”, dijo Christopher LaFemina, analista de Jefferies LLC, que recomienda comprar acciones de Freeport. “Si uno va a depender del precio de una materia prima, esta es la indicada. En comparación con el mineral de hierro o el carbón, el cobre es mejor”.
Mientras Freeport se prepara para una ampliación de US$ 4,600 millones en la mina de Cerro Verde en Perú, el máximo responsable ejecutivo Richard Adkerson se sumará a un debate sobre la reacción de la oferta ante la desaceleración de la demanda en la reunión anual de la industria en Santiago esta semana. Mientras que Freeport busca una expansión, competidores como Anglo American Plc y Teck Resources Ltd. han postergado sus inversiones.
Precios más sostenidos
Por ahora, los precios del metal que se usa para fabricar cables eléctricos se sostienen mejor que los de otros productos primarios industriales.
La industria esperó con preocupación cuando el cobre cayó 13% en la Bolsa de Metales de Londres en enero en tanto el petróleo y el mineral de hierro se desplomaban a los niveles más bajos en seis años luego de que los productores inundaron el mercado.
Desde entonces, una serie de problemas en la producción indicó que el excedente de cobre proyectado para este año no se producirá, impulsando un alza del 10%.
En febrero, Adkerson declaró en una conferencia en Florida que, si la demanda de cobre crece al 2.5% anual en la próxima década, la industria deberá expandirse en 10 millones de toneladas, o más del 50% de su capacidad mundial instalada, para hacer frente a ese ritmo y al agotamiento de las minas viejas.
Sólo se han realizado dos descubrimientos significativos desde el de Freeport en Indonesia en 1988, uno de los cuales tuvo lugar en el Desierto de Gobi y tiene dificultades para expandirse en tanto su propietario, Rio Tinto Group, y el gobierno de Mongolia discuten los términos, explicó Leon Westgate, analista de ICBC Standard Bank Plc en Londres.