Bloomberg.- La estrategia de General Motors de evitar las ventas con descuentos a empresas de alquiler de coches y concentrarse en las ventas más rentables de camionetas y vehículos utilitarios deportivos (SUV, por sus siglas en inglés) a los consumidores estadounidenses está rindiendo frutos antes de un difícil segundo semestre del año.
Las ganancias ajustadas de US$ 1.89 por acción en los tres meses terminados en junio superaron la estimación de US$ 1.70 por acción de los analistas.
La automotriz más grande de Estados Unidos vendió una combinación más rica de SUV y camionetas a compradores minoristas y bajó costos en Norteamérica durante el trimestre.
Su máxima ejecutiva, Mary Barra, alejó a GM de la vieja práctica de recurrir a grandes ventas de sedanes con descuento a empresas con flotas para alquiler como Hertz Global Holdings y Avis Budget Group Inc.
La automotriz tiene que seguir demostrando que es capaz de mejorar la salud de sus negocios más allá de la superficie en tanto el mercado automotor estadounidense se contrae tras años de crecimiento.
“Un énfasis disciplinado y implacable en mejorar nuestro desempeño comercial rindió un trimestre fuerte y un primer semestre muy sólido este año”, dijo Barra este martes en un comunicado de la empresa.
“La producción del segundo semestre será inferior que la del primero, debido al período de inactividad que anticipamos”, dijo el director financiero, Chuck Stevens, a periodistas en la sede de GM en Detroit.
“Las ganancias del segundo semestre serán menores que las del primero, lo que es totalmente acorde a la directriz que proporcionamos anteriormente en este año”.
GM tiene programadas 13 semanas de cierre para el segundo semestre en fábricas que deben prepararse para construir camionetas y SUV más nuevos. La empresa eliminó un turno en cuatro plantas de montaje de autos y tiene programado hacer lo mismo en una quinta en septiembre.
GM construirá cerca de 15,000 vehículos menos en Norteamérica en el segundo semestre en comparación con los primeros seis meses del año, dijo Stevens.
Iniciativas
Mientras GM abandona aspectos menos rentables de sus negocios en su país natal, Barra también lleva años promoviendo iniciativas para abandonar mercados extranjeros donde la empresa no logra obtener ganancias consistentes.
Por primera vez, GM categorizó a varias unidades europeas, entre ellas las marcas Opel y Vauxhall, como operaciones descontinuadas.
La empresa espera cerrar la venta de esas operaciones a PSA Group antes de fin de año y que los gastos de la transacción se sumen a un gasto especial de unos US$ 5,500 millones.
En mayo, GM informó que su marca Chevrolet abandonará el mercado indio y que sus operaciones en ese país se reconcentrarán en las exportaciones.
Isuzu Motors asumirá las operaciones manufactureras de GM en Sudáfrica, que se suma a Venezuela y Rusia en la lista de mercados de los que se fue GM bajo la dirección de Barra.
Riesgos
Al abandonar muchos mercados externos, las ganancias de GM pasaron a depender cada vez más de cómo le vaya en Norteamérica.
Un riesgo para los negocios de la empresa en la región son los más de 100 días de oferta de vehículos que tiene en los lotes de las concesionarias en EE.UU. La cifra equivale a cerca de un mes más de inventario que el promedio de la industria.