Igual que ocurre con Universitario y Alianza Lima, el club arequipeño también arrastra deudas con la Sunat, por lo que desde el 2013 cuenta con administradores temporales.

Cuando la Junta de Acreedores, en enero del 2014, nombró como nuevo administrador tempral al abogado arequipeño José Alejandro Suárez Zanabria, ex decano del Colegio de Abogados de Arequipa, el club acumulaba una deuda de casi S/. 5 millones, según informaron medios de esta ciudad.

El primer paso que dio Suárez Zanabria fue “poner orden” en la casa, pues los balances no cuadraban, no se sabía adónde iban a parar muchos de los ingresos del club. La primera administración temporal del 2013 no llegó a presentar su balance y había generado más deudas.

La segunda medida fue buscar inversores que apuesten por el club. Allí fue clave convencer a Jader Rizqallah, un peruano con raíces palestinas, quien se ha convertido en el principal inversionista de Melgar.

Según fuentes de Gestión, Rizqallah compró parte de las acreencias que tiene Melgar con la Sunat, valorizadas en poco más de S/. 3 millones. Quedó un saldo de acrencia con la Sunar de medio millón de soles que empezará a ser pagada por Melgar desde enero del 2016, junto con el resto de la deuda.

Rizqallah se ha convertido ahora en uno de los acreedores de Melgar, no es el dueño del club, pues la administración temporal continuará.

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En el plano futbolístico, en el 2014 se contrató a un entrenador con recorrido internacional y que impone disciplina como Juan Reynoso, a quien se le permitió armar un equipo a su medida.

El buen ojo de Reynoso le permitió traer a Omar Fernández, un delantero que vino de la segunda base del Cruz Azul de México (club en el que jugó Reynoso) y que hoy fue autor del tercer gol del Melgar, el cual le dio el campeonato peruano.

Suárez Zanabria cierra el 2015 con optimismo. La taquilla por espectadores se cuadruplicó. Melgar registró un ingreso bruto de US$ 100,000 y US$ 20,000 en utilidades.

“Para el 2016 esperamos duplicar eso. Queremos crear un semillero, porque el negocio del fútbol es la venta de jugadores”, declaró Suárez Zanabria a la prensa arequipeña.

“La intención es que Melgar nunca más sea un equipo de mitad de tabla para abajo sino que pelee siempre los campeonatos”, prometió.