(Bloomberg)¿Otros minoristas estarán dispuestos a seguir la moda de Macy’s?
La cadena de tiendas de departamentos más grande de Estados Unidos sorprendió gratamente a Wall Street la semana pasada al anunciar sus planes de cerrar 100 tiendas, equivalentes a un 12% de su base total de locales, más de 12 tiendas que las cerradas en conjunto durante los últimos seis años.
Las acciones de Macy’s se dispararon un 17%con las noticias, mientras los inversores ignoraban un sexto trimestre consecutivo de caída de las ventas en tiendas comparables.
La decisión tardó bastante en llegar. Macy’s tiene demasiadas tiendas y necesitaba cerrar prácticamente todos esos 100 locales para recuperar los niveles de producción que la cadena registró en el 2006, según un informe de la firma de investigación de bienes raíces Green Street Advisors. La pregunta es: ¿los elogios a Macy’s por tomar su medicina proporcionarán un incentivo –o una cobertura– suficiente para que sus competidores sigan su ejemplo?
En base al análisis de Green Street, J.C. Penney tendría que cerrar 320 de sus 1.000 tiendas y Sears debería clausurar 300 de sus 700 locales para recuperar los niveles de productividad que gozaban hace una década. Nordstrom, Dillards y Bon-Ton necesitarían bajar las cortinas de otras 130 tiendas en conjunto.
El informe de Green Street se enfocó en las grandes tiendas ubicadas en centros comerciales, por lo tanto, no dio una estimación para Kohl’s, que opera 1.200 locales, principalmente fuera de los malls, y anunció la semana pasada que no prevé cierres en el 2017. (Kohl’s cerró 18 tiendas en febrero). Kevin Mansell, máximo responsable ejecutivo de la compañía, dijo que prefería esperar hasta después de la temporada de verano antes de decidir si continuará con los cierres y que unas pocas tiendas “no serán la clave del éxito”.
Según Mansell, las tiendas actualmente se están volviendo cada vez más importantes para Kohl’s porque, aunque un quinto de sus productos se vende online, estos se eligen en las tiendas tradicionales. Contar con “puntos de distribución” y tiendas digitales se transformó en una combinación muy importante para todas las empresas, agregó Wesley McDonald, máximo responsable financiero de Kohl’s.
Pero esperen un momento. Si están hablando de “puntos de distribución”, ¿estos incluyen las bodegas? Estas no requieren el mismo tipo de costos asociados a las operaciones de servicios al cliente, personal, sistemas y marketing de una tienda minorista. Tampoco tienen que estar ubicadas en establecimientos de costosos pagos de arrendamiento. Pero, de todas maneras, Kohl’s procedió a explicar la manera en que evalúan el cierre de los locales: buscan tiendas con arriendos por vencer que no representen un aumento en el flujo de caja. Esto nos hace volver a preguntarnos por qué la medida de Macy’s es un paso hacia la dirección correcta.
Macy’s informó que las 100 tiendas identificadas lograban un flujo de caja positivo o, con otras palabras, todos estos locales estaban aportando dinero. La compañía las cerrará de todas maneras porque su rentabilidad y ventas están bajando, lo que pesa en el negocio en general.
Al igual que Kohl’s, muchas otras cadenas de tiendas de departamentos de Estados Unidos anunciaron la semana pasada que no tienen planes de emular las decisiones de Macy’s en cuanto al cierre de locales. J.C. Penney incluso dijo que apuesta a que los cierres de tiendas de Macy’s atraerán clientes a su propia cadena. Pero si las ventas y las utilidades siguen cayendo en las tiendas tradicionales, no habrá más opción que cerrarlas. Quizá sería una medida más inteligente jugar a seguir al líder más pronto que tarde.
Esta columna no refleja necesariamente la opinión de Bloomberg LP y sus propietarios.