Por Daniel Goya

Eliot Chahúan parece un hombre que encuentra más respuestas pisando un pedal que en una reunión en la que debe estar sentado durante horas. El gerente general de San Fernando cuenta emocionado las veces que ha viajado hacia el sur para visitar las granjas de la avícola y ha tenido que pedirle al chofer que lo llevaba que lo deje manejar a él.

“Es más rápido cuando manejo yo, además así me relajo”, dice y sonríe como quien justifica una travesura. Desde muy joven aprendió a manejar su motocicleta y descubrió la fascinación de ir de un lado a otro con prisa.

Esta mañana también está apurado. Luego de la entrevista, Chahuán dejará su oficina de San Isidro e irá a un minimarket San Fernando, a un punto de distribución de sus productos en Surquillo, verificará los nuevos camiones que compró su empresa, irá a Barranco para levantar un pavo de 12 kilos para la sesión de fotos, tendrá hambre y regresará a San Isidro para almorzar antes de una reunión importante de trabajo. Todo eso antes de que sean las dos de la tarde.

La pasión por la velocidad de Chahuán parece trasladada al rápido crecimiento de la empresa que lidera. Solo el año pasado las ventas de carne de pavita se incrementaron 40% con respecto al 2011 y ahora los productos agregados al catálogo –todo lo que no es pollo– representan el 30% de las ventas, lo que a su vez significa un aumento del 10% en solo dos años. Parece que en San Fernando todo vuela.

En los próximos días es casi seguro que usted coma pavo y que ese pavo sea San Fernando. Y si no es usted lo hará alguien que conoce. Serán casi 1,5 millones de aves las que venderá la avícola más importante del Perú. Pero detrás de las cifras contundentes, del liderazgo en el mercado y del crecimiento sostenido está un hombre con un plan para convertir a la empresa de la familia Ikeda en un referente mundial en la crianza de aves, listar en la bolsa de valores muy pronto y preparar a la tercera generación Ikeda para que asuma el liderazgo de la compañía.

San Fernando está cómodo en el Perú pero tienen retos en el extranjero, ¿cómo van los planes de expansión en la región?
Muy bien. Ya estamos en Bolivia como Prous, que es nuestra empresa genética. También vendemos a Ecuador, Colombia y Panamá. Vendemos a esos países cerca de 200.000 pavos cada año. Pensamos seguir creciendo y vemos que hay muchas posibilidades en los países vecinos. Sobre todo a nivel genético.

¿Cómo maneja la exposición y el riesgo que tiene San Fernando ante la volatilidad del precio de sus insumos?
Bueno, el pollo es un commodity y eso es más difícil de llevar. ¿Cuál es el secreto? Saber comprar bien. Nosotros miramos día a día cómo va el tema. Tú te descuidas un día y es fatal. Tienes que estar día a día en la compra de los macroinsumos como la soya o el maíz. Eso es uno de los principales pilares de este negocio: saber comprar. El segundo pilar es saber criar porque no es solamente comprar el maíz, sino que ese maíz y esa soya tienen que ser lo más eficiente posible. Hay que saber alimentar al pollo. Gracias a Dios parte de la fortaleza de San Fernando es que los hermanos Ikeda han sido muy hábiles en este tema. Una de sus principales fortalezas de la compañía es la crianza. Hace poco fui a una feria mundial en EE.UU. y me impresionó ver que nosotros éramos referentes mundiales en crianza de pollos y el nombre de los hermanos está en el top tres del mundo de criadores.

¿Cuál es su estrategia para reconocer cuándo comprar y cuándo no?
Tenemos que estar detrás de ese tema todos los días. Hay que ver los precios. Vigilarlos. Estamos atentos a las cosechas, al clima. El año pasado el clima le jugó mal a EE.UU. y todos los macroinsumos se nos fueron hacia arriba. Este año la cosecha ha sido buena, no espectacular, pero sí buena y eso ha jalado los precios de los insumos hacia abajo. Tenemos informes que revisamos muy al detalle y aprovechamos para jugar con los stocks. Somos el importador más grande de grano y eso lo usamos también a nuestro favor.

Lea la entrevista completa en la edición de hoy, que viene con el Diario Gestión a S/. 5